ALICANTE. El Hércules ya no es ese bloque compacto y temible del inicio del curso liguero, pero tras 16 partidos es segundo a solo tres puntos del líder y cuenta con un significativo colchón respecto al quinto.
Los blanquiazules atraviesan una crisis de juego que se extiende ya por cinco jornadas y que no lo es también de resultados porque además de haber logrado nueve de los últimos 15 puntos disputados, a excepción del Lleida, los rivales directos están siendo tanto o más irregulares hasta el punto de que el Hércules ha pasado en esas cinco jornadas de la primera a la segunda plaza, caído a continuación a la tercera y ahora es segundo.
Un punto más, una posición menos
El equipo de Lluís Planagumà ocupa la segunda posición con 30 puntos, después de lograr nueve victorias, tres empates y cuatro derrotas en las 16 jornadas disputadas. Los blanquiazules están a tres puntos del líder, el Lleida (al que derrotaron en su campo (0-1); tienen uno de ventaja sobre el Villarreal B que es tercero y dos respecto Baleares que cierra las posiciones de 'play-off'. Cornellà y Sabadell, que ocupan la quinta y sexta plaza respectivamente, quedan a cinco puntos del equipo alicantino.
Estamos, por tanto, ante el Hércules que más puntos ha logrado a estas alturas de campeonato en los cinco años que pena por la tercera categoría del fútbol patrio, pero no el mejor clasificado y es que en la 2014/15, con José Rojo 'Pacheta' en el banquillo, el Hércules era líder a la finalización de la jornada 16. Eso sí, contaba entonces con 29 puntos, uno menos que el actual. Los blanquizules habían ganado ocho partidos, empatado cinco y perdido tres; anotado 20 goles y encajado 10 (había ganado un partido menos, recibido un gol más y anotado cinco más).
Ese curso 2014/15 los cuatro equipos que ocupaban las plazas de 'play-off' estaban en un pañuelo todavía más apretado: el Hércules era primero con 29 puntos, uno más que el Espanyol B que ocupaba la segunda plaza, quedando Reus y Lleida como tercero y cuarto con 27. Quinto era el Nàstic que contaba con 26 puntos, es decir, con tres menos que los blanquiazules, pero que hizo un pleno de victorias en las tres jornadas que restaban de la primera vuelta que le permitió adelantar a la finalización de la 19 a un Hércules que sufrió una profunda pájara que a finales de enero terminó costándole el puesto a Pacheta. Por cierto, el Nàstic acabó la Liga regular como primero y ascendió al deshacerse en la eliminatoria de campeones del Huesca, siendo el único equipo del grupo III que logró salir del pozo.
26 puntos con Herrero y 24 con Tevenet y Claudio
Hace justo un año el Hércules era sexto con 24 puntos, después de ganar seis partidos, empatar otros seis y perder cuatro; el equipo blanquiazul, que tras la destitución de Siviero entrenaba ya Claudio Barragán, había anotado 20 goles y encajado 16. Tenía a dos puntos la cuarta y tercera plaza y a la friolera de 14 al líder.
En el curso liguero 2016/17, con Luis García Tevenet como técnico, el Hércules era también sexto con 24 puntos (venía de caer en El Collao por 3-0) tras 16 partidos en los que logró siete victorias, tres empates y seis derrotas, anotado 22 goles y recibiendo 15. La cuarta plaza estaba a solo un punto y el líder a 10.
Y en la Liga 2015/16, con Manolo Herrero en el banquillo, a la finalización de la jornada 16 el Hércules era quinto con 26 puntos, los mismos que tenía el cuarto clasificado y nueve menos que el líder. Los blanquiazules habían ganado seis partidos, empatado ocho y perdido solo dos, anotando 17 goles a favor y encajando 12.
