VALÈNCIA. El entrenador del Elche CF, Jorge Almirón, afirmó este viernes que el partido que va a disputar el domingo su equipo ante el Real Betis es el más duro de todos los que ha tenido que afrontar desde el inicio de la competición.
“A excepción del día de la Real, que estábamos en construcción y es el mejor equipo para mí, el del Betis es el más duro”, indicó el preparador argentino, quien elogió la “historia y jerarquía” del conjunto sevillano, al que confesó que sigue mucho “por sus jugadores y su entrenador”.
En este sentido, Almirón recordó que en el Real Betis milita el mexicano Andrés Guardado, quien llegó a ser compañero suyo como jugador, y que dirigió en San Lorenzo, donde Manuel Pellegrini, por el que dijo sentir “admiración por su trayectoria” dejó un gran recuerdo.
“Jugamos ante un equipo de gran categoría, que viene de perder dos partidos. Para mí va a ser el partido más complejo por la categoría de los jugadores, por el gran entrenador que tiene y porque está diseñado para pelear por los primeros puestos”, explicó.
Almirón aseguró que el Elche llega a este partido en un buen estado de ánimo tras las últimas victorias y con la ilusión de prolongar la racha de imbatibilidad de cuatro jornadas.
El técnico agradeció los mensajes ambiciosos que llegan desde el vestuario al valorar las opciones del Elche en la competición, pero recordó que el equipo es un “recién ascendido y tiene claro cuál es su lugar”.
El preparador también se refirió a la situación del delantero Juan Francisco Martínez ‘Nino’, santo y seña del club, quien apenas ha contado para él en este inicio de la competición.
“Hablé con él y ahora estoy eligiendo a otros. Lo respeto muchísimo porque sé de su trayectoria. Es especial y no es cualquier jugador y tengo muy claro que cuando le toque jugar va a estar preparado”, indicó el argentino.
Almirón recordó que el Elche ha tenido un buen inicio de temporada “pero nada más que eso” y valoró que los resultados han ayudado a dar credibilidad a su mensaje tras un cambio de entrenador “que dolió emocionalmente”, en alusión a la salida de Pacheta.
“Si se hubieran jugado los dos primeros partidos, ante Barcelona y Sevilla, es posible que en las tres primeras jornadas hubiéramos sumado cero puntos. Y hubiera cambiado todo el estado de ánimo”, reflexionó Almirón, quien admitió también su “preocupación” por la evolución de la pandemia.