VALÈNCIA. Pese a ir perdiendo el domingo en el estadio de La Cerámica, pese a producirse (Gayà y Canós) dos bajas en la banda izquierda, y pese a realizar variaciones en la media punta, Sellim Amallah no jugó ni un sólo minuto en el estadio de La Cerámica.
Con más de dos tercios del campeonato disputados, el marroquí que llegara en verano cedido del Valladolid, no ha acabado de encontrar su sitio en Valencia pese a las buenas referencias con las que llegaba a la capital del Turia.
Bien es cierto que puede haber influido el paréntesis que acometió para ir con su país a la Copa África de naciones. Pero mientras Diakhaby, tuvo el mismo hándicap volvió para rendir a buen nivel hasta su desgraciada lesión ante el Real Madrid.
Amallah nunca ha acabado este año de explotar. De hecho, hay algunos futbolistas, que según rachas o estado de forma han ido entrando en el once de manera más discontínua: Foulquier, Canós, Guillamón, Javi Guerra, Yaremchuk...
En determinadas fases de la temporada, el aficionado valencianista podía recitar de memoria un once en el que, según el momento del año, algunos jugadores entraban o no en dicho equipo inicial. Nunca fue el caso del marroquí.
Amallah ha jugado 16 partidos en liga con el Valencia CF y ha sumado en total 579 minutos. No ha anotado ningún gol, ha dado una asistencia, ha visto 4 cartulinas amarillas y una roja (el día de la Real Sociedad en Mestalla. Ha sido titular en 7 ocasiones pero sólo ha disputado dos partidos completos (ante el Mallorca en la jornada 9 y ante el Rayo en la 18).
Tras su vuelta de la Copa África, la cosa aún ha ido a peor. Disputó 1 minuto ante el Almería en la jornada 23, 67 ante Las Palmas en la jornada 24, 17 en el Real Madrid en la jornada 27, 6 minutos ante el Getafe en la 28 y cero ante el Villareal en esta última jornada.
Su bajada de rendimiento le ha hecho incluso perder el sitio en la última convocatoria de la selcción de su país con la que completó un buen Mundial y fue también llamado a la Copa Africa. En la última lista, el seleccionador Walid Regragui decidió no convocar al futbolista del Valencia CF.
Pese al cartel con el que llegó a Mestalla, la realidad es que el marroquí no ha acabado de convencer ni al entrenador ni a la grada, más allá de su innegable carácter voluntarioso (en ocasiones, en exceso) en cada partido. Conforme se acerca el final de la temporada, y dadas las dificultades del club para desembolsar dinero a la hora de reforzar la plantilla, el futuro de Amallah parece lejos de Valencia.