ELCHE (EFE). El entrenador del Elche, Sebastián Beccacece, aceptó este viernes con resignación los tres partidos de suspensión con los que ha sido sancionado tras su expulsión la pasada jornada ante el Eibar, pero indicó que aún no sabe por qué vio la tarjeta roja.
“No queda más que aceptarlo. Y ya está, pero no sé por qué me expulsaron”, dijo en rueda de prensa el rosarino, quien dijo que puede entender la amarilla tras la protesta de todo el banquillo por un gol anulado, pero no la segunda sanción.
“Se lo pregunté después al árbitro, pero dijo que no quería hablar del partido”, desveló Becacece, quien insistió en que únicamente levantó mínimamente los brazos como protesta.
“Jamás le falto el respeto a los árbitros. Después sí que tuve una no correspondía, pero era porque no entendía la expulsión”, dijo en alusión a que entró varios metros en el campo pidiendo explicaciones tras la expulsión.
El técnico reflexionó sobre la necesidad de que los entrenadores pudieran defenderse de estas sanciones ante una especie de “tribunal”, ya que recordó que la secuencia de los hechos puede verse perfectamente.
Beccacece se mostró convencido de que el equipo no acusará su ausencia desde la banda en las próximas jornadas “porque sabe lo que tiene que hacer”.
“Yo sé que lo más valioso son los futbolistas pero a mí me gusta estar en primera línea, en la trinchera, y disfrutar y sufrir con ellos. Tengo cero influencia en el juego, pero me gusta vivirlo así porque lo siento así”, explicó el técnico, quien añadió que “nadie es imprescindible” en el actual proyecto del Elche.
Por último, el argentino aseguró que su compatriota Guillermo Andrés Marino será el responsable de dirigir al equipo desde el banquillo en las tres próximas jornadas, comenzando por este domingo en Cartagena.
“Es extremadamente opuesto a mí y así nos compensamos”, indicó sobre la forma de vivir los partidos de su segundo, al que definió como una persona “extraordinaria”.
“Que no esté yo no va a ser un condicionante para que el equipo haga lo que tiene que hacer. Lo del banquillo es circunstancial. Tengo la convicción de que el equipo va a hacer un gran partido”, sentenció.