ELCHE. Pere Milla regresó este sábado al estadio Martínez Valero, siendo abroncado por más de 20.000 de los 21.009 espectadores que asistieron al Elche-Espanyol.
El ilerdense ya fue silbado a su llegada al coliseo franjiverde, durante el calentamiento y cuando resonó su nombre por la megafonía mientras se anunciaban las alineaciones de ambos conjuntos. Ahora bien, cuando en el minuto 53 saltó al terreno de juego por Pol Lozano...
Se puede decir que Milla rivalizó en protagonismo con los también 'pericos' Puado y Braithwaite, solo que no con el balón (apenas participó, más allá de una falta frontal que estrelló en la barrera) y sí a nivel de atención del franjiverdismo, que no olvida lo sucedido con él los dos últimos veranos.
También regresaba al Martínez Valero con el Espanyol el ilicitano Óscar Gil, quien tuvo que seguir todo el choque desde el banquillo. A diferencia del delantero, que en agosto del año pasado fue objeto de un traspaso (a cambio de un fijo de 2,5 millones de euros), el lateral compró su liberta en 2020 a cambio de 500.000 euros.