El Valencia se llevó un duro varapalo contra el Real Madrid al caer por 1-4 en un partido en el que mereció mejor suerte. Dos penaltis de Montoya en la primera parte pusieron muy difícil un encuentro en el que Santi Mina recortó diferencias. Sin embargo, Marcelo y Kroos cerraron una goleada excesiva para los de Marcelino
VALÈNCIA. El Valencia se llevó un duro varapalo contra el Real Madrid al caer por 1-4 en un partido en el que mereció mejor suerte. Dos penaltis de Montoya en la primera parte pusieron muy difícil un encuentro en el que Santi Mina recortó diferencias. Sin embargo, Marcelo y Kroos cerraron una goleada excesiva para los de Marcelino que ven reducida su renta con los blancos a solo dos puntos en la clasificación.
La tensión que entrañaba un duelo directo en la lucha por la Champions se masticaba desde el primer minuto. El primero en ‘abrir’ fuego fue Gareth Bale. Un fallo de comunicación entre Neto y Garay en un balón aéreo provocó el error. Ambos chocaron y el balón quedó ‘muerto’ para Bale que empalmó el balón, pero el brasileño rectificó el fallo con una buena parada. El Valencia respondió acto seguido con un disparo de Rodrigo que se marchó alto y que vaticinaba un choque de trenes en Mestalla.
Al cuarto de hora, llegó el gol del Real Madrid. Los blancos trazaron un preciso contraataque entre Cristiano, Marcelo y Benzema. El portugués se quedó delante de Neto, Montoya se cruzó y el colegiado señaló la pena máxima. El lateral derribó al delantero madridista sin tocar el balón. Cristiano no falló y puso el 0-1 en el marcador. Los de Marcelino no se fueron del partido pese al golpe. De hecho, pudo empatar a los diez minutos. Kondogbia recogió un rechace en la frontal y tras dos amagos en los que sentó a Casemiro y dribló a Modric, disparó con potencia, pero apareció Keylor Navas para evitar la igualada con una buena parada.
Sin embargo, cuando mejor estaba el Valencia llegó la ‘puntilla’ en forma de pena máxima. Estrada Fernández señaló un penalti algo dudoso por un empujón de Montoya a Benzema. Un contacto que el valencianista se podía haber ahorrado. Cristiano marcó el segundo y el 0-2 alejaba mucho al Valencia de sacar algo positivo. Aún así, los de Marcelino empujaban y pudieron meterse en el partido al borde del descanso con dos buenas ocasiones. Santi Mina cuajó una gran jugada individual zafándose de Modric y su centro lo remató Rodrigo que no pudo dirigir el balón a la red cuando lo tenía todo a favor para marcar. La segunda fue para Guedes que cruzó el esférico, pero Keylor Navas rozó lo suficiente para preservar la ventaja del Real Madrid en el primer acto.
Tras la reanudación, Marcelino sorprendió retirando a Guedes y dio entrada a Carlos Soler que volvía a los terrenos de juego casi dos meses después. El Real Madrid encontraba espacios al contragolpe y podía matar el encuentro. Lo tuvo Benzema en sus botas pero su remate acabó en el lateral de la red. El Valencia tiraba de casta, empujado por Mestalla, era todo o nada. Rodrigo pudo recortar diferencias pero no llegó a un centro al segundo por centímetros.
El Valencia no había dicho su última palabra porque la fe mueve montañas, que se lo digan a Santi Mina. El gallego refleja la garra y pasión de Mestalla. No para y lucha hasta el final. Volvió a meter al Valencia en el partido. El gallego cabeceó a la red un saque de esquina que reafirmaba la convicción de los locales de remontar el encuentro. Era el 1-2 y quedaba mucho partido por delante.
El intercambio de golpes era un auténtico espectáculo para el espectador. Bale pudo hacer el tercero y Gayà empatar, pero ambos no acertaron en la definición. El Valencia crecía y crecía en el partido pero la falta de acierto y Keylor Navas sostenían al Real Madrid. Parejo pudo marcar con una gran jugada colectiva si el costarricense no hubiera sacado un pie milagroso. El empuje del Valencia no cesaba y Rodrigo también rozó el gol con un tiro cruzado. El Real Madrid que había bajado físicamente, también era temible al contragolpe. Bale galopó y dio un pase de la muerte a Cristiano que remató a las manos de Neto.
La emoción envolvía un duelo vibrante que finiquitó Marcelo. El lateral brasileño culminó a la red una brillante acción para hacer el 1-3. Un gol en el que Neto pudo hacer algo más. El gol enterró las aspiraciones del Valencia que mereció más pero acabó saliendo goleado con el definitivo cuarto tanto de Kroos que supuso un excesivo castigo para los de Marcelino.
Con esta derrota, el Valencia CF se queda dos puntos por encima del Real Madrid en la clasificación aunque los blancos todavía tienen un partido pendiente contra el Leganés.