Cronología de un divorcio: así se gestó la salida de Coquelin

VALÈNCIA. Antes de bajar la persiana de la temporada, el Valencia ya había comunicado a los agentes de algunos futbolistas que este mercado iba a ser movido para ellos. Uno de ellos era un Francis Coquelin que, desde el aterrizaje del doctor López Mateu en el departamento médico del club, se había convertido en una de las cabezas a cortar sin miramientos la propiedad. Los roces del francés con el nuevo jefe médico -que hoy ha vuelto a comandar el estamento con el despido de personal bajo su orden- le llevaron a estar en el punto de mira. Coquelin era un peso pesado del vestuario, con galones y liderazgo, y el aviso a los jugadores no fue de farol.

Días después de terminar La Liga, el 22 de julio, PlazaDeportiva adelantó la oferta de un equipo árabe por Coquelin. Al ex del Arsenal le satisfacía emigrar fuera de Europa para continuar su carrera a sus 29 años, con un salario que superaba los 3,5 millones de euros por temporada y un contrato de, mínimo, dos cursos. Sin embargo, el montante final de aquella oferta no satisfacía los intereses del Valencia. Era inferior a lo que hoy el Villarreal desembolsa por el centrocampista. 

Además, Coquelin tenía ofertas de clubes europeos sobre la mesa. Las buenas temporadas del '17' valencianista no habían pasado desapercibidas en el viejo continente y para el de Laval no iba a ser un problema el número de clubes interesados en sus servicios. Pronto llegó el Villarreal a entrar en la puja por el centrocampista y en Meriton empezó a germinar la idea que ni él ni Dani Parejo volvieran a Paterna para pasar la revisión médica pertinente tras las vacaciones. 

Sin embargo, Coquelin llegó el lunes ya con su traspaso a La Cerámica más que masticado. El galo regresó de vacaciones a sabiendas de que no sería jugador del Valencia la próxima campaña pese a su voluntad inicial de no abandonar la entidad y conociendo cuál sería su destino. Su objetivo ya era poder hacer oficial su fichaje por el Villarreal el martes, este miércoles como muy tarde, aunque los groguets querían acelerar la firma. 

Es la cronología de una salida, previo divorcio, que deja herido al valencianismo. El jugador pasó satisfactoriamente la revisión médica en Villarreal y será de Submarino por las próximas tres o cuatro temporadas.