VALÈNCIA. Dani Gómez pudo salir del Levante rumbo a Elche en los últimos coletazos del mercado. El presidente de la entidad de Orriols, Quico Catalán, ya confirmó el pasado jueves que se habían recibido intereses importantes por el delantero, y uno de ellos fue el franjiverde. En cualquier caso, la marcha del madrileño estaba supeditada a la llegada de otro ariete a la disciplina de Alessio Lisci, y ese otro jugador, como bien explicó el propio presidente, fue un Manu Vallejo por el que el club esperó hasta el último día -pese a la negativa, una semana antes, de participar en el trueque con el Valencia por Malsa- y al que el Levante tuvo atado antes de que cambiara de opinión en cuestión de horas. Fue en esas cuando el cuadro ilicitano preguntó por el delantero en la recta final de la ventana de traspasos, pero Quico Catalán no quiso debilitar al equipo, tal y como contó en su última comparecencia pública.
Y es que la salida de Dani Gómez fue una posibilidad sobre la mesa durante todo el mes de enero. La Segunda División se erigió como el mayor escaparate para el '21' levantinista. El delantero de Alcorcón tiene mucho mercado en la categoría de plata después de su buena temporada en el Tenerife, pero en Primera no afloraron la misma cantidad de intereses. El Cádiz, de hecho, llegó a tocar a la puerta de una decena de atacantes entre los que no estaba el del Levante y en una locura final de mercado que acabó con Lucas Pérez vistiendo de amarillo. Y ese fue, precisamente, uno de los motivos de la consulta express del Elche por Dani Gómez. En el último suspiro del mercado, el gallego firmó con el Cádiz por una temporada más otra opcional. Eso, unido al deseo del punta de cambiar de aires, precipitó la búsqueda de delanteros en el Martínez Valero. Finalmente, fue Ezequiel Ponce el que recaló en el conjunto de Francisco cedido por el Spartak de Moscú, lesionado y tras tres meses sin jugar.
Tampoco se fijó en Dani Gómez el propio Alavés, que a pesar de que Vallejo acabó firmando tras dejar plantado al Levante, no tocó a la puerta del alcorconero. Ni el Mallorca, que firmó a Muriqi procedente de la Lazio. Sí estuvo detrás el Girona y otros equipos de Segunda, pero la intención en el Ciutat de València siempre fue la de darle salida solo en caso de que llegara otro atacante. Eso sí, durante la última tarde del período de traspasos, el Levante solo aceleró por el 'asunto Vallejo'. No hubo alternativa. El gaditano rompió su palabra con todos los contratos redactados en las oficinas de Orriols y ahí se cerró la persiana del mercado para la entidad granota. Y con ello, la premisa fue que sin nuevas altas, no iba a haber bajas. Ni la de Dani Gómez ni la posibilidad de dinamitar los contratos a punto de concluir de jugadores hoy residuales como Nikola Vukcevic o Coke Andújar.
"Le doy la enhorabuena a Dani porque, cuando llegué, fui muy sincero y muy duro con él, tenía que mejorar cosas y ha respondido a pesar de tener pocos minutos", dijo Alessio en la previa del derbi ante el Valencia el pasado día 19 de diciembre. El ariete, cuyo porcentaje por derechos económicos comparte el Levante con el Real Madrid -al estilo De Frutos-, jugó de titular ese partido. Y, además, con buen rendimiento. Participó e incluso estuvo a punto de ampliar la ventaja cuando el rival ya achuchaba con 2-1 en el marcador. Sin embargo, desde aquel empujón público del entrenador italiano, que reconoció haber sido agradado por la buena actitud del delantero, Dani Gómez no ha vuelto a ser titular. Marcó en Copa y en la debacle de Villarreal fue suplente. Disputó 12 minutos.
Después, no jugó ni en la victoria frente al Mallorca ni en la dolorosa derrota contra el Cádiz hasta que en Getafe volvió a disfrutar de minutos (23) con el resultado en contra y el encuentro ya totalmente fuera del alcance granota. La próxima cita ante el Betis puede ser importante para él: Roger no será de la partida al cumplir ciclo de amonestacines, y previsiblemente el escogido para sustituir al pistolero será Soldado con un sistema distinto al planteado en el Coliseum, con línea de cinco atrás. Aún así, si se enlazan acontecimientos a toro pasado, Dani Gómez estuvo a punto de salir del Ciutat de no ser por la negativa repentina de Manu Vallejo, y ahora lucha por aglutinar minutos en un Levante alejado de la pelea por la permanencia.