El plan inicial de Pereira no funciona

VALÈNCIA. Javi Pereira fue absolutamente claro: "De momento el Levante no tiene la fiabilidad ni la contundencia defensiva necesarias para sobrevivir en Primera División", dijo el pacense tras el bochorno granota frente al Granada. El "estamos jugando con fuego" o el "no podemos salir a los partidos perdiendo prácticamente desde el vestuario" no hicieron más que aderezar el categórico y aplastante discurso de un entrenador que aterrizó con el objetivo de echar el cerrojo subrayado con permanente en lo alto de su libreta y que está palpando de primera mano las dificultades de su plantilla para conseguirlo.

El preparador extremeño prometía, por sus números en el Henan Jianye y en los cuerpos técnicos con los que ha trabajado, una firmeza mayor a la que el cuadro de Paco López estaba ofreciendo. Se avecinaba un paso directo de la alegría, el atrevimiento y la toma de riesgos, al arropamiento, la sobriedad y la reducción de errores no forzados. Sin embargo, la realidad con la que se ha topado es bien diferente. Los fallos de Clerc en Sevilla y ante el Granada para regalarle el gol a Luis Suárez, la pasividad de Vezo en la marca a Germán o la derrota de Róber Pier en el duelo con Diego Carlos, la pasividad general en el tanto de Rafa Mir y en el de Griezmann en el Ciutat... Son agujeros que no evitan la friolera cifra de 10 tantos recibidos en cuatro choques con Pereira en el banco. 

Con estos datos en la mano, la lógica impera y el Levante es el equipo más goleado de La Liga, con 23 goles. La estadística crece y el club se mantiene lejos de los números defensivos en los últimos descensos granotas. Hoy son peores. También en cuanto a puntos. Y a eso Pereira, al que le costó 10 partidos llegar a los 10 goles en contra en China, no está acostumbrado. Ni siquiera el argumento de que la Superliga es una competición menor, en la que resulta más sencillo cerrar la portería con un recién ascendido, sirve si se observan otras andaduras del pacense como asistente. Por ejemplo, en el propio Levante a la vera de Juan Ignacio Martínez, tardó 13 citas ligueras en alcanzar la cifra actual.  

A todas luces, el plan no está funcionando. Ni con línea de cuatro atrás, ni con tres centrales en retaguardia. El equipo puede estar más o menos lúcido en la zona ofensiva, puede ser más o menos efectivo, incluso encontrar la suerte antes o después, pero no logra marcar un gol más que el rival. Y eso, "si encajas tanto y tu average particular es tan negativo", se complica cada vez más. Así lo remarcó el entrenador en PlazaDeportiva.com tras ser presentado. Y hoy, aunque solo Pereira doble los partidos con portería a cero de los granotas en todo 2021, aunque volviera a echar el cerrojo casi siete meses después en partido oficial, el Levante sigue con los mismos problemas traseros. El nuevo técnico tiene trabajo por delante y de momento su plan inicial no funciona: los de Orriols son los únicos en el fútbol de élite nacional y de las grandes ligas -junto a Newcastle, Norwich, Arminia Bielefeld, Greuther Fürt y  Saint-Étienne- que no han estrenado su casillero de victorias.