El valor de la plantilla del Levante descenderá varios puestos entre una Segunda División de altos vuelos

29/06/2024 - 

VALÈNCIA. La Segunda División de históricos de la próxima temporada continuará minando al Levante en la clasificación de valores y Límite de Coste de Plantilla Deportiva (LCPD). Será el tercer curso consecutivo en que el conjunto de Orriols milite en la categoría de plata y, si en la recién concluida campaña, el club ya tenía la octava plantilla del campeonato a este efecto -según datos del portal estadístico Transfermarkt, 27,5 millones de euros-, los nuevos descendidos procedentes de Primera y los clubes que han restado en Segunda que ya figuraban por delante en esta tabla -Zaragoza, Oviedo, Elche, Sporting de Gijón y Eibar-, unido a la situación económica de la entidad, harán bajar algunos puestos. 

En este sentido, precisamente el futbolista que más ha aumentado su valor -de acuerdo con el mencionado portal- es uno de los que el Levante pretende traspasar. La semana es crucial para cuadrar los 4,5 'kilos' por los que se ha de vender antes de que julio llegue al calendario y Pablo Martínez es, hoy, la pieza franquicia entre las manos de Felipe Miñambres. Con un valor de 2,5 millones según Transfermarkt, el club pretende sacar la máxima tajada posible, por una cantidad que supere los 5 millones de euros entre cantidades a cobrar de manera inmediata o a través de fórmulas que hagan computar ya el montante total a ingresar en base a porcentajes futuros. La misma fórmula, por ejemplo, que se siguió con la venta de De Frutos al Rayo Vallecano, uno de los equipos interesados en hacerse con los servicios de Pablo. 

La salida de Pablo, que se da por hecha en el club, propiciará que ese valor de mercado de la plantilla se siga reduciendo en favor de otros clubes de la categoría, que engordarán o mantendrán esta partida. Además, cabe recordar que el Fair Play Financiero del Levante está excedido, a pesar de la intención y la ingeniería financiera para incorporar a Morales e Iborra. El club triplicaba su LCPD tras el cierre del mercado de fichajes de invierno puesto que ese epígrafe que marca La Liga había continuado menguando y la reducción del coste del vestuario que Miñambres había emprendido en verano no había sido lo suficientemente severo. Ese límite se sotenía en febrero en los 4,7 millones de euros.

 

Había 19 equipos de Segunda con un límite menos ajustado. El Levante volverá a estar previsiblemente sobre esa altura de la imaginaria clasificación y el mercado de fichajes en el que se mueve la dirección deportiva vuelve a ser 'low cost'. No solo por lo que condiciona el regreso de Morales e Iborra, sino por lo ahogado de las arcas del Ciutat, que siguen obligando a vender a las piezas con más mercado.