VALÈNCIA. Exactamente una semana ha pasado desde que el Levante cayera en Tenerife con una imagen deficiente y ante otra oportunidad de lujo para manosear el ascenso directo. Ha sido una semana dura para el levantinismo y para el equipo de Javi Calleja, que ante el Ibiza tendrá el deber de vencer para mantenerse con opciones si no quiere caer a un siempre enrevesado playoff. El director deportivo de la entidad granota, Felipe Miñambres, tiene fe en que los cuatro escudos que lideran la clasificación de la Segunda División pinchen en los tres partidos que restan. El Levante lo necesita de manera imperiosa porque ya no depende de sí mismo, pero al máximo responsable deportivo del club se le ve fresco, con confianza.
Atiende a Plaza Deportiva en mitad de un momento cumbre. El arrebato de la hinchada por la diferencia entre lo visto frente al Alavés y el pasado fin de semana pone en tela de juicio el ambiente del Ciutat el próximo lunes. Sin embargo, la expresión del astorgano es la de aquel que, al menos de cara a la galería, se mantiene firme. Miñambres también exporta confianza respecto a Javi Calleja, quien tampoco vive su momento de máxima popularidad en el Ciutat. Pase lo que pase, y aunque la temporada exija una reflexión por la cantidad de finales perdidas para amarrar las plazas nobles de la tabla, el técnico "continuará en el Levante si hay ascenso".
- Días duros por lo visto en Tenerife...
- Ha sido una semana dura y larga. Es duro perder cuando tienes la expectativa de ponerte arriba y estar en una situación un pelín más tranquila. Ya nos ha pasado más veces esta temporada y, más que perder, es duro no haber estado en el partido como sí hemos estado en otros encuentros. Mismamente en Las Palmas el equipo nos transmitió algo diferente a lo de Tenerife. No hicimos un buen partido, pero en otros momentos de la temporada nos ha pasado que, estando bastante por debajo de lo que deberíamos, hemos tenido opciones de empatar. Y a veces se dice que los puntos no son importantes, pero este sí lo hubiese sido anímicamente.
- Son cosas que se piensan durante el partido, pero el Levante debía salir a ganar.
- Íbamos a ganar porque se nos abría una situación muy buena. Habíamos estado viendo todos juntos, en el hotel en Tenerife, el partido del Alavés y el Granada. Falla un penalti Salva Sevilla... y ves que estamos ahí. Lo peor es eso, tener unas expectativas y no cumplirlas no solo en el resultado, sino en las sensaciones del equipo. Estuvimos por debajo. A partir de ahí, lo que queda es limpiar lo más rápido posible. El viaje es muy malo, el primer entrenamiento es muy malo, el segundo es un poco mejor y el tercero ya estás pensando en el Ibiza. Los jugadores ahora están mejor y todo el mundo está pensando que seguimos teniendo opciones. Va a depender de los resultados del fin de semana... y nosotros ganar el lunes.
- ¿Lo del Alavés fue un espejismo?
- Los dos del Alavés han sido los mejores partidos de la temporada. Vamos a tener que jugar contra el Alavés siempre (ríe). Nosotros nos hemos comportado mejor contra los equipos de nuestra Liga, quitando quizá el día del Eibar en Ipurúa. En el resto, el equipo ha estado mejor contra los seis primeros. Nos ha costado más contra equipos que están en otras circunstancias. Yo creo que lo del Alavés no es un espejismo. Confluyen las situaciones de dos clubes que se juegan mucho y que nosotros hemos sabido manejar mejor los partidos. Ayudó mucho también el ambiente y ponerte pronto por delante.
- ¿Teme que contra el Ibiza no sea igual? ¿Que no anotar pronto pueda generar nerviosismo?
- Todos tenemos que estar preparados para ganar el partido al final. ¿Qué querríamos todos? Meter rápido y vivir un partido tranquilo. Pero es que a veces no son así las cosas. Imagino que saldremos a por ellos y a intentar marcar, pero a veces no marcas. Y a veces no se da en los primeros 20 minutos y sí en los 20 últimos... Siempre es más fácil rendir en un ambiente como fue el del Ciutat el otro día. Ese ambiente tiene influencia, era un ambiente positivo, de que se iba a lograr y de que un error de los jugadores no era tan tenido en cuenta como en otras ocasiones.
- Entiendo que le está pidiendo a la afición que se comporte igual contra el Ibiza.
- Pedirle a la afición es difícil. Ellos siempre tratan de dar. Pero lo que nosotros creemos es que se consiguen las cosas mucho mejor cuando todos remamos en la misma dirección. Después... quedan tres partidos y habrá tiempo de hacer análisis, criticarnos o pitarnos. Es fácil pedirlo y el fútbol es pasión. Desde la pasión hay cosas que sientan mal, y hay errores que aceptas de peor forma. El ambiente del otro día ante el Alavés es difícil mostrarlo todos los domingos, pero si somos capaces de hacerlo el equipo va en otra línea. Las cosas fluyen mejor y, a veces, cuando no es así, fluyen peor. Quedan pocos partidos, todos tenemos que dar nuestra mejor versión. Los futbolistas también y es cierto que el otro día no la dieron. Pero no estamos muertos y hay que levantarse rápido para seguir peleando. Si nos quedamos con la bofetada del otro día, vamos a caer.
- Hay quien piensa que la temporada ya es decepcionante, pase lo que pase. ¿Cree que es así?
"La temporada es decepcionante si piensas que íbamos a estar primeros a 16 puntos"
- Eso depende de las expectativas que tú te hagas ante las situaciones. Cada uno se hace las suyas. Si alguien habla de "decepcionante" y se consigue el objetivo, no creo que lo sea tanto. Otra cosa es que sí sea decepcionante para lo que esa persona creía que iba a ser la temporada. Si pensaba que íbamos a estar primeros a 16 puntos del segundo... claro que es decepcionante. Si ascendemos, para mí, no lo es. ¿Podrá haber sido una temporada más dura de lo que mucha gente esperaba? Bueno... la Segunda es la Segunda. Lo que no es normal es lo que se consiguió en el último ascenso. Si ese era el techo...
- Quizá no, pero la sensación existe, sobre todo, por la cantidad de finales que se han echado a perder...
- Bueno, el equipo ha ido a rebufo todo el año. Todos hemos tenido oportunidades y las hemos desperdiciado. Yo insisto en que esto tiene que ver con lo que uno esperara antes de iniciar la temporada. Hay circunstancias que ocurren durante la temporada que te perjudican. No me gusta entrar en ellas, no me gusta llorar, las cosas vienen como vienen, pero existen. Y cada equipo sabe las suyas. Con las que nos ha tocado convivir estamos donde estamos. Nos gustaría estar a seis puntos del segundo, pero no hemos podido, por deméritos o por circunstancias, no voy a entrar. Entro en que quedan tres partidos, que tenemos que ganar al Ibiza, después al Villarreal y a partir de ahí veremos cómo se presenta el último partido. Es tiempo de sacudirnos el polvo de la leche que nos dieron en Tenerife.
- Más tarde hablaremos de esas circunstancias -imagino que habla de las lesiones- pero antes, hablemos del futuro inmediato. ¿Por dónde pasa el plan deportivo del club si no hay ascenso?
- El ascenso va a marcar el plan, claro. Nuestro presupuesto en Segunda será la mitad o menos de la mitad de este año. Cada año que pasas en Segunda es mucho más difícil el ascenso y tiene que coincidir que 10 de los 25 jugadores tengan el nivel más alto de su carrera. Se podrá dar, pero tendremos complicaciones. A veces se meten en la pelea equipos que no están entre los más altos en cuanto a presupuesto... Pero el tema, si no se asciende, será entonces tratar de que los que se queden y los que se fichen alcancen su más alto rendimiento. Un ejemplo es el Tenerife, que el año pasado se metió y este año ha disminuido el rendimiento de un muy buen equipo que ya estuvo junto el año pasado. Habrá que luchar con las armas que tengamos, pero lo que es seguro es que tendremos muchas menos armas que ahora.
- ¿Y hay un plan en caso de que el Levante siga cayendo en picado estas últimas tres jornadas? Es decir, antes de que se produzca un 'no ascenso'. Pregunto, sobre todo, por la figura de Calleja.
- Es un tema mental. Le ha pasado a todos. El año pasado el Eibar pierde el ascenso por un tema mental. El que viene de abajo viene con una energía diferente. Y de los seis que estamos ahora mismo en ascenso, cinco teníamos la obligación de ascender directo y eso crea una responsabilidad. Quien entre sexto, lo hará con una energía diferente y, en caso de caer y entrar en playoff, tendremos que borrarlo. Si no, perderemos antes de jugar.
- Pero insisto en la figura del entrenador. ¿Se puede asegurar que Calleja acabará la temporada pase lo que pase?
- Sí, claro. Me sorprende la pregunta.
- ¿Y en caso de ascenso, tiene asegurada la continuidad?
- Sí, sí. Tiene contrato. A no ser que nos paguen la cláusula...
- Para quien sí ha terminado la temporada, por cierto, es para el entrenador del filial. El contrato de Chema Sanz sí concluye este verano y no se ha conseguido el ascenso a Segunda RFEF. ¿Qué hay con Chema Sanz?
- Imagino que nos pondremos de acuerdo. La idea es que continúe con nosotros. Sabemos que es el filial más joven en mucho tiempo y también ha sufrido lesiones, como el primer equipo. Acabamos jugando contra el Torrent sin tres o cuatro titulares porque estaban con el primer equipo, pero no es excusa. La plantilla es la que es, muy joven, y hemos estado ahí. Nos ha eliminado un equipo al que no hemos conseguido ganar ni en temporada regular ni en playoff. Seguro que ha sido un apredizaje.
- Porque de la temporada del filial ¿sí se puede hablar de decepción o fracaso?
- Es una decepción. Fracaso, no. Nos gustaría estar cuanto más arriba, mejor, pero la escuela está para dar jugadores para el primer equipo. El no ascenso me decepciona por los chicos, porque van a vivir otra temporada en Tercera RFEF. Es una categoría dura, son muchos campos de césped artificial... Pero lo digo más por ellos que por la situación, en realidad. Me alegra cuando van cinco o seis con Calleja e incluso tienen la oportunidad de jugar, como Andrés. Yo, con este filial, tengo la sensación de que muchos de los que van convocados con el primer equipo, si les toca jugar, van a dar la cara y a ayudarnos. Eso es lo importante para mí. Prefiero que de esta generación del Juvenil y del Atlético Levante podamos tener futuro, antes que el hecho de ascender.
-¿Por qué?
Porque si quedamos campeones, si arrasamos... muchísimo mejor, pero yo he estado en clubes donde hemos sido campeones de Copa y de Liga, y no han salido jugadores. Y otros filiales que no han estado arriba sí han nutrido al primer equipo. Para mí es mucho más importante eso. Hay muchos jugadores que salen de Tercera a Primera, y cuando digo esa frase en Valencia muchos me recuerdan que en el Valencia de Tercera salió Isco. En el Rayo Vallecano siempre nos salieron muchos más jugadores de Tercera que de la Segunda B antigua. A veces no necesitas tener un muy buen equipo -y ascender- y sí tener cuatro jugadores por encima del nivel. En el Rayo División de Honor teníamos a Leo Baptistao y Lass Bangoura, y ese equipo no quedó campeón. Y luego de otro Rayo que fue campeón de Copa contra el Real Madrid, ninguno llegó a jugar en el primer equipo. Ni siquiera Kike Pérez, hoy en el Valladolid. Hay algunos en Segunda. Era un muy buen equipo, pero no había ninguna individualidad. A mí me hace verdadera ilusión el plan estratégico de que el 40% sean jugadores de cantera en cinco años. Y si pueden ser más, mejor. Para Sergio Gómez y la gente que trabaja en la escuela, ver que hay seis jugadores en la última convocatoria es un orgullo.