VALÈNCIA. Con seis bajas en el zurrón. Así se encuentra el Levante ahora mismo. Iborra se ha unido a la lista de ausencias que no se han subido al autobús camino de Huesca y Calleja tendrá que volver a hacer encaje de bolillos, precisamente sin el futbolista que la pasada jornada le sirvió de parche para reconstruir una defensa destroquelada por las lesiones. Así que, sin el moncadense, ni Vezo, Postigo, Campaña, Burgui ni Mustafi -aunque con la recuperación de Álex Muñoz-, el técnico habrá de construir un once que mantenga el rumbo en El Alcoraz.
Cárdenas estará a buen seguro bajo los palos y en la pareja de centrales no hay demasiadas salidas: Róber Pier y Álex Muñoz habrán de ocupar el eje. En la izquierda, Saracchi; en la derecha, se abre el abanico con dos alternativas entre las que puede adelantarse, aunque no lo hizo la semana pasada, el nombre de Marc Pubill.
Mientras, el centro del campo del Levante hoy no se entiende sin Pepelu y Pablo Martínez al mando, más allá del resto de caídos en batalla. Montiel podría repetir escorado a banda o cayendo por dentro, dejando los costados para Rober Ibáñez en detrimento de Cantero y De Frutos, inamovible en la diestra. En punta, salvo movimiento de piezas de Calleja, debería mantenerse un Bouldini camino de sus mejores registros goleadores.
Con todo, el once del Levante en Huesca podría asemejarse al formado por Cárdenas, Pubill, Róber Pier, Álex Muñoz, Saracchi, Pepelu, Pablo Martínez, Montiel, Rober Ibáñez, De Frutos y Bouldini.