VALÈNCIA. Finlandia, que disputa su primera Eurocopa, no se conforma con la sorprendente victoria ante Dinamarca en la primera jornada y quiere seguir haciendo historia ante una cabizbaja Rusia, que llega al partido con el agua al cuello tras ser vapuleada por Bélgica.
Por si había alguna duda, el seleccionador finlandés, Markku Kanerva, recordó que tres puntos no garantizan la clasificación para los octavos de final y que los “huuhkajat” (búhos reales) aún no ha cumplido su sueño.
Los escandinavos son conscientes de que tuvieron suerte contra los daneses, que estaban aturdidos por el desvanecimiento de Christian Eriksen y encajaron un gol en la única ocasión de la que dispuso el equipo rival.
Pero quieren aprovechar el regalo para llegar lo más lejos posible. Como ocurriera en el partido de Copenhague, contra los rusos también jugarán en campo rival, San Petersburgo.
El esquema será prácticamente el mismo. Todo el equipo detrás del balón; aprovechar un balón parado y armar algún contraataque a la espalda de la lenta defensa rusa.
Kanerva admitió hoy que le vale el empate y que la defensa deberá repetir la magnífica actuación de Copenhague, pero también que deberán mejorar en ataque.
Los centrales finlandeses, Arajuuri y O'Shauhnessy, superan el 1,90 de altura, así que no deberían tener dificultades para detener a la mayor amenaza ofensiva local, el gigantón delantero del Zenit, Artiom Dzyuba.
Pohjanpalo, autor a balón parado del único gol ante los daneses, demostró que es una garantía. Pero la gran esperanza del ataque finlandés sigue siendo Teemu Pukki (Norwich), que pareció un poco oxidado el sábado después de pasarse dos meses lesionado.
Aunque sea durante dos horas, el hockey sobre hielo, deporte nacional en Finlandia, cederá el paso al fútbol.
Mientras, Rusia necesita introducir cambios en el equipo, ya que la derrota ante los “diablos rojos” dejó muchas dudas al seleccionador, Stanislav Cherchésov, objeto de duras críticas en la prensa, tanto por la táctica como por la elección del once inicial.
“La crítica fue absolutamente merecida. Ahora queremos la revancha”, dijo en la rueda de prensa.
La primera duda es la portería. Shunin, que no convencía a nadie como titular, estuvo inseguro y fallón. Akinféev, el héroe de la tanda de penaltis ante España en el Mundial, no es una alternativa, ya que abandonó la selección hace tres años, pero sí Safónov, el portero del Krasnodar y de la sub-21.
La defensa tiene menos solución. Seménov no dio la talla, pero el tercer central, Kudriashov, acaba de volver a los entrenamientos; Divéev no está al cien por cien; y Dzhikiya está 'entre algodones', según admitió Cherchésov.
Quizás la solución sea jugar un fútbol más abierto en el que los laterales largos, de lo mejor del equipo ruso, puedan llegar hasta la línea de fondo para alimentar a Dzyuba, que apenas recibió balones en el primer partido.
Ese papel lo pueden jugar Mario Fernandese por la derecha y Karaváev por la izquierda, ya que, según Cherchésov, el veterano Zhirkov es muy probable que se pierda lo que queda de Eurocopa por una lesión muscular.
Si Cherchésov quiere más profundidad en ataque podría quitar a uno de los mediocentros defensivos, Ozdóev o Zobnin, y optar por Kuzyáev, un jugador universal que fue sustituido a la media hora ante Bélgica por un golpe con Castagne, que sufrió una doble fractura en el rostro.
Probablemente, tenga también su oportunidad de inicio Alexéi Miranchuk, el zurdo del Atalanta, suplente ante los belgas. Está claro que Alexandr Golovín (Mónaco) no puede llevar todo el peso de la responsabilidad en ataque.
- Alineaciones probables:
Finlandia: Hradecky; Toivio, Arajuuri, O'Shaughnessy; Raitala, Lod, Sparv, Kamara, Uronen; Pohjanpalo y Pukki.
Rusia: Shunin; Mario Fernandes, Dzhikiya, Seménov, Karaváev; Ozdóev, Zobnin, Golovín, Miranchuk, Iónov; y Dzyuba.
Árbitro: Danny Makkelie (NED)
Estadio: Krestovski (San Petersburgo)
Hora: 16:00 (13:00 GMT).