Iván Romero y Postigo se mantienen a la espera 

VALÈNCIA. Iván Romero y Sergio Postigo están en ascuas. Ambos futbolistas del Levante, por ahora los dos más cercanos a unirse al grupo de cara a la reanudación liguera el próximo 13 de enero en Orriols -después del ya reincorporado Vezo-, continuaron sin completar la sesión de este miércoles, cuyo final pudo ser disfrutado por más de 4.000 granotas. La afición ocupó todo el ancho de la tribuna del Ciutat en una jornada navideña y de encuentro entre plantillas masculina y famenina con la afición para arrancar un 2024 plagado de retos en el club. El de central y delantero es poder aterrizar en la visita del Albacete dentro de semana y media. Un reto de altura.

El capitán sufre la misma lesión que Kocho, pero el caso del georgiano parece ir para más largo. La dolencia en el recto femoral suele suele abarcar el mes de recuperación y Postigo cayó, al igual que el centrocampista, durante el encuentro en El Molinón del pasado 9 de diciembre. Con el central habrá que ir con pies de plomo, y es que el club no especificó tiempos de recuperación en una lesión cuyos plazos pueden variar mucho en función de la evolución. Es la misma de la que cayó y recayó Fabrício en el primer tramo de la temporada, antes de volver a salir del cascarón y lesionarse en el bíceps femoral en Zaragoza. El punto positivo, en este caso, es que el regreso de Vezo, con Álex Muñoz y Dela en condiciones, reduce urgencias en el eje.

Por su parte, Iván Romero lleva más tiempo en el dique seco. El desgarro en el bíceps femoral izquierdo, una lesión de una gravedad mayor -de grado 1-2-, le obligó a despedirse del año a inicios de diciembre. Algo más de un mes después, se antoja más complicado ver al manchego en plena forma para el regreso a La Liga después de, en su caso también, salir al césped apenas para regalar balones, tomarse fotografías y firmar autógrafos en la entrañable mañana de este miércoles.

Así que el parón de tres semanas le podrá venir bien a Javi Calleja para recuperar fundamentalmente a Vezo. El portugués sí que debería llegar sin problemas a la cita del Albacete, así como un Andrés García con quien, tras tres meses y medio de ausencia, apunta a empezar el año poco a poco.