Léleman Conqueridor viaja a Melilla con la mente puesta en hacer historia y meterse en semifinales

VALÈNCIA. El Léleman Conqueridor Valencia está ante la primera oportunidad de hacer historia en el voleibol valenciano y meterse en las primeras semifinales de la Superliga de voleibol masculina para la ciudad del Turia. Los valencianos viajan a Melilla para disputar el segundo y tercer partido -este último en caso de ser necesario- con toda la ilusión puesta en sacar un triunfo y prolongar la temporada con un acceso a las semifinales tras dos campañas del grupo en la máxima competición nacional.

Conqueridor Valencia afrontará su primer punto de semifinales el sábado a partir de las 16:00 horas. Los valencianos, con todavía el subidón de adrenalina en el cuerpo tras la remontada del pasado sábado ante su afición (3-1), llegan a la ciudad autónoma con un extra de motivación para sumar un triunfo que les haga cerrar la eliminatoria por la vía rápida. Por si fuera poco, las semifinales esperan y enfrentarían al conjunto valenciano frente al ganador de la serie entre Guaguas y Emevé, que por el momento lidera el conjunto canario, campeón de la liga regular.

El Léleman Conqueridor Valencia realizará uno de los desplazamientos más complicados de la temporada en el momento más importante del año y con las semifinales al alcance de su mano. Los de Fabián Muraco, que llegan al 100% de sus capacidades físicas, confían en el buen hacer de su saque, la efectividad ofensiva y el carácter de sus jugadores para cerrar la eliminatoria en cualquiera de los dos encuentros que podrían llegar a disputarse.

Melilla Sport Capital contará con el apoyo de su afición y se aferrará al Javier Imbroda para dar la vuelta a la eliminatoria. Si los melillenses vencieran el sábado, el domingo se celebrará el choque definitivo a vida o muerte a partir de las 17:00 horas, casi sin tiempo de reacción para ambos equipos. Salim Abdelkader finalizó el encuentro con dos jugadores que acostumbran a ser suplentes en pista, como son el capitán Mikael Tahiri y Balsa Radunovic, en sustitución de Federico Martina y Mariano Giustiniano. Los argentinos no parecían tener problemas físicos, pero podrían ser sacrificados o reservados como ya hiciera el equipo de la ciudad autónoma.