VALÈNCIA. Ni a Lourdes ni a la Mare de Déu. Milagros, a Elda. El Levante vuelve a tierras alicantinas con más esperanza que realidades en la mochila. Terminar la temporada en plazas de 'playoff' depende de demasiadas cosas y del conjunto de Felipe Miñambres solo depende el ganar los tres encuentros que restan de curso. El primero, el que se juega este sábado en el Nuevo Pepico Amat ante un rival que también ha de sumar si no quiere meterse en problemas en la recta final. El problema viene después, porque los de Orriols han de esperar demasiados resultados de rivales directos por la sexta posición de Liga. Hasta cinco oponentes han de ir tropezando para que el Levante pueda acceder a la promoción en la última jornada.
Por ahora, el sexto -el Racing de Santander- y el Levante -undécimo- están separados por cinco puntos que, realidad, son seis, pues con los cántabros y el Oviedo -quinto, con los mismos 61 puntos- está el goalaverage particular totalmente perdido. Y solo faltan nueve por disputar. Que el cuadro granota consiguiese firmar tres triunfos seguidos -algo que no ha logrado en toda la campaña- y, además, contase con todos los marcadores necesarios durante las próximas tres semanas, es algo que asciende a la categoría de milagro. Eso sí, para Felipe Miñambres, no vender esta noche y que sí se fuesen dando los resultados imperativos, "sería para darnos cabezazos contra la pared". Así lo expresó el técnico y director deportivo al mismo tiempo, justo en la semana en que el polémico regreso de José Morales en el mercado ha acaparado la actualidas blaugrana.
Sea como sea, de ganar hoy, el Levante tendría que mirar el resto de números de la jornada para conocer si ha caminado hacia delante o se ha quedado en el mismo sitio. Justo antes, se la juega el mismo Racing. De perder, no habría más cálculos. El club estaría fuera del objetivo y, entonces, se podría manejar públicamente lo que ya se cuece en la planta noble del Ciutat: la planificación deportiva de la temporada que viene encima del escenario de la Segunda División. Para, al menos, estirar la situación en el tiempo, Miñambres volverá a optar por un once de gala en el que podría entrar Bouldini tras frenar una preocupante sequía la pasada semana.
Mientras tanto, el triunfo del Eldense en Brugos en la jornada anterior no solo puso fin a una racha de dos meses sin ganar, sino que ha permitido pasar del alambre sin red a situarse a un paso del objetivo. Una victoria de los locales esta noche permitiría sellar la permanencia en la categoría de plata siempre y cuando Alcorcón y Amorebieta no ganen en sus respectivos encuentros ante Valladolid y Tenerife, respectivamente.
Es un escenario que ha variado totalmente en apenas una semana con los tres puntos obtenidos en El Plantío y los resultados cosechados por sus rivales directos, algo que ha permitido al Eldense abrir un hueco de cinco puntos sobre la zona de descenso cuando restan nueve por disputarse.
El defensa Darío Dumic, uno de los jugadores más utilizados por Fernando Estévez en el presente curso, tiene claro que “tenemos que hacer nuestro trabajo y lo que pase en otros partidos no lo tenemos controlado” para añadir que “hay que sumar tantos puntos como sea posible”. La expectación para este duelo entre Eldense y Levante, que vuelve a Elda después de 36 años de ausencia, se ha disparado ante lo que hay en juego por ambas partes por lo que se espera una gran entrada en el Nuevo Pepico Amat.
Alineaciones probables
CD Eldense: Mackay, Toni Abad, Dumic, Iñigo Piña, Marc Mateu, David Timor, Sergio Ortuño, Clemente, Iván Chapela, Mario Soberón y Juanto Ortuño
Levante UD: Andrés Fernández, Andrés García, Dela, Cabello, Valle, Carlos Álvarez, Lozano, Rey, Pablo Martínez, Brugué y Bouldini
Árbitro: Alejandro Quintero González / Moreno Aragón (VAR)
Estadio: Nuevo Pepico Amat.
Hora: 21h