VALÈNCIA. Morales tiene una fisura en la tibia y un edema óseo. Es lo que determinan las primeras exploraciones en la pierna izquierda del Comandante después de que ayer tuviese que salir en camilla de San Mamés. Ahora todo depende del grado de la fisura y la posición exacta del edema en su rodilla zurda para determinar un tiempo de baja estimado.
Morales podría irse al mes y medio de dique seco en función de la localización de la dolencia y el tiempo de pacificación, aunque es algo que todavía no está confirmado. En cualquier caso, de momento el jugador sigue siendo positivo con que la lesión no le deje en la enfermería por mucho más tiempo. A la espera de resultados más precisos.
Sin embargo, lo que puede complicar las cosas no es tanto una pequeña fisura -o "fuerte contusión", tal y como publica el club- como el mismo edema. Dependiendo de la inflamación, el apoyo en la acción con Vesga y el tratamiento que siga, puede suponer un problema más grave. Expertos confirman a este periódico que en función de la magnitud del coágulo podría perderse incluso la temporada, pero por ahora es una incógnita en el caso del '11'. Eso sí, el dolor de capitán en la zona ha remitido desde el lance de ayer y eso otorga cierto optimismo en el club.