El nuevo entrenador del Oporto garantizó que llega al club portugués "para ganar" y defendió que volver al club en el que militó como jugador era su "destino"
VALENCIA. El nuevo entrenador del Oporto, Nuno Espírito Santo, garantizó este miércoles que llega al club portugués "para ganar" y defendió que volver al club en el que militó como jugador era su "destino".
"Siento que vuelvo a casa, ésta es mi casa. Volver a casa para ganar, para vencer, es mi destino. Sabe mucho mejor ganar en el Oporto", aseguró en la rueda de prensa de presentación que tuvo lugar este miércoles en el Estadio Do Dragão, en Oporto.
El nuevo técnico aseguró que es un "honor" tomar las riendas del Oporto y garantizó a los aficionados que "con trabajo y con unión" los "dragones" volverán a ganar títulos, tras tres temporadas seguidas en blanco.
"Pongo el acento en tres pilares: compromiso, cooperación y comunicación. Esto es fundamental para la unión en torno al grupo y al club", explicó Espírito Santo, que afirmó que cuando recibió la llamada del club no le importó "nada más".
Espírito Santo, nacido en Santo Tomé y Príncipe hace 42 años, se inició en el mundo del fútbol como portero y jugó en equipos españoles como el Deportivo de la Coruña, el Osasuna y el Mérida, así como en el Dínamo de Moscú.
En Portugal, el equipo donde pasó más temporadas fue precisamente el Oporto (cinco años), club que dejó en 2010 para empezar su carrera como entrenador.
Como técnico, fue entrenador de porteros en el Málaga y en el Panathinaikos -en este último como ayudante de su compatriota Jesualdo Ferreira- y posteriormente se estrenó como técnico principal en el modesto Rio Ave (2012-2014).
En el club luso consiguió acabar la Liga en sexta posición durante su primera temporada y llegar hasta las finales de la Copa de la Liga y la Copa de Portugal en la segunda.
Su éxito en el Rio Ave le llevó al Valencia, donde aterrizó en el verano de 2014 y dirigió al equipo durante una temporada y media.
Aunque cerró su primer año con éxito y logró la clasificación para la Liga de Campeones, en su segunda temporada no logró el rendimiento esperado y abandonó el club el pasado mes de noviembre.
Espírito Santo, representado por el agente luso Jorge Mendes, sustituye en el banquillo del Oporto a su compatriota José Peseiro, destituido tras apenas media temporada al frente de los "dragones" en la que no consiguió ningún título y perdió la final de la Copa de Portugal.