VALÈNCIA. La cabra tira al monte y Paco López, al trivote. En el 65' el míster decidió sacar a Rochina por un Vukcevic exhausto. El partido iba 2-0 y la defensa granota se mostraba hermética. El Rayo, más y más volcado en busca del milagro, dejaba muchos espacios y se intuía la goleada. De hecho, el Llevant había dispuesto de múltiples ocasiones, entre ellas un penalti que desaprovechó Morales. Su afán por mejorar estadísticas personales no es siempre beneficio para el equipo. Y el Comandante no tira bien los penalties. Alguien debería poner coto a esto. Morales forzó para estar y se mostró incisivo aunque fallón en la definición y en el último pase. Hubo otras, clarísimas: hasta tres mano a mano de Mayoral frente a Alberto. Es tan cierto que trabaja como un titán como que el de Parla no tiene gol. Alguien, cuando acabe este martirio, esperemos que con final feliz, deberá dar alguna explicación sobre Roger Martí.
Volvamos al minuto 65. López podía haber puesto a jugar a Postigo o Cabaco y desplazar a Pier a la posición de Vukcevic para mantener el equilibrio que tan magnífico rendimiento ha dado hasta la fecha, pero el de Silla decidió —con la permanencia en juego, una ventaja de dos goles y el Rayo hundido— ofrecer al rival una ruleta rusa, como si el Llevant necesitase algo más que los tres puntos, comosi ese maldito sistema del trivote de toquecito sin retaguardia no fuese justo lo que nos ha puesto en esta tesitura de estar peleando con el cuchillo en los dientes por mantener la categoría, cuando había plantilla para haber pugnado por plazas europeas.
Con más posesión,el Rayo, hasta ese momento, sólo había dispuesto de una opción de gol, salvada por Aitor, y algunos ensayos lejanos. Desde el 65' fue un vendaval. Se dedicó a aprovechar todos los espacios entre líneas que aparecieron tras la marcha de Vukcevic. Lejos de corregir el error con algún otro cambio, López (y los 24.000 que llevamos al Llevant en volandas) vimos como el Rayo empató, creó peligro y tuvo una ocasión clarísima para el 2-2, desbaratada de nuevo por Aitor. El reloj no corría y, al final, en una contra disparada por Bardhi, el macedonio forzó con picardía la segunda amarilla de Embarba (81') y, acto seguido, Jason llevó el extasis a las gradas con un testarazo santillanesco (84'). Lo celebró con rabia indisimulada y esprintó para abrazar a López, que siempre creyó en él y que, sin duda, tenía razón.
Por fin respiró la hinchada de Orriols que ofreció una matinal desbordante de apoyo incondicional a los suyos y que aun tuvo tiempo para solidarizarse con los numerosos vallecanos desplazados.
CLAVES, por Borja Bens
••• El resultado del partido es engañoso. El Llevant podría haber marcado más de 4 goles pero sus atacantes no han definido bien de cara a portería. ¿Quién sabe cuántos goles hubiera marcado hoy un ariete con olfato goleador —sí, como Roger—.
••• El Llevant ha jugado a la contra desde el primer momento. Toño y Coke han estado correctos en defensa pero no se les ha visto participar en las jugadas de ataque tanto como nos tienen acostumbrados, lo cual ha proporcionado mayor solidez defensiva.
••• Desde que Vukcevic ha tenido que marcharse del campo al rival le ha resultado más sencillo entrar por el centro de la defensa.
••• Campaña está resultando decisivo en la recta final del campeonato liguero: en sus últimos tres partidos tres de sus corners han acabado en gol y él ha marcado 3 goles.
Llevant UD 4-1 Rayo Vallecano
Aitor(8 ); Coke (6),Vezo (9), Pier (7),Toño (6); Jason (7), Bardhi (7),Vukcevic (8) (Rochina (5) 65'), Campaña (8), Morales (6) (Postigo (sc) 87'); Mayoral (6) (Simon (6) 78').
GOLES: 1-0 Campaña 13'; 2-0 Vezo 42'; 2-1 Álvaro70'; 3-1 Jason 84'; 4-1 Bardhi 89'.