VALÈNCIA. (EFE).- El entrenador del Deportivo Alavés, Pablo Machín, explicó este domingo que está convencido de que podrían haber ganado al Levante (1-1) y criticó la "ingenua e innecesaria" expulsión de su futbolista Edgar Méndez en la primera parte.
"Era una muy buena oportunidad tal y como se nos había puesto el partido. Tengo el convencimiento de que podíamos haber ganado el partido con once futbolistas, porque hemos tenido ocasiones tan claras como ellos con un jugador más", dijo Machín tras el encuentro.
El entrenador del Alavés lamentó la expulsión "ingenua" de Edgar, que fue expulsado por introducir el balón en el campo para retrasar el saque de una falta rival, y confesó que les había penalizado.
"Me voy contrariado. Hemos sido solidarios y hemos tratado de subsanar ese error individual que sin duda nos ha penalizado en este partido. Son situaciones innecesarias", agregó el técnico.
"A todos nos cuestan mucho los puntos y los goles y no podemos dar ventaja al rival. Seguro que (Edgar) no querría eso y tendrá su explicación. Todo el mundo puede tener un error y una segunda oportunidad", indicó Machín.
El entrenador del Alavés reconoció que ya con once futbolistas "ellos nos estaban apretando pero sabíamos que iban a llegar a la contra nuestras oportunidades como han llegado en la segunda parte".
Sin embargo, Machín comentó que debe ser positivo porque "siempre que puntúas y si lo haces fuera de casa más y en las circunstancias que lo hemos hecho todavía más" y explicó que el punto "lo damos por bueno".
Además, el técnico del club vasco dijo que Lucas Pérez se retiró con un fuerte golpe en el tobillo y se alegró por su gol. "Es lo que suele hacer Lucas", finalizó.