ALBACETE. Como "justo" calificaba José Rojo 'Pacheta' el empate con el que se había cerrado el choque de los suyos ante el Albacete de este domingo.
El entrenador franjiverde ser refería al mismo como "un gran partido" que aseguraba que había tenido que agradar al espectador: "El resultado es justo, el empate ha llegado en un error de ellos pero habíamos tenido suficientes ocasiones para marcar", decía Pacheta que insistía en que por ahora no cambia de objetivo.
"Hasta que no tengamos 48-49 puntos nosotros vamos a seguir mirando hacia abajo (...) es un objetivo más que ambicioso para un recién ascendido y con un presupuesto justos, pese a que nos hemos convertido en un muy buen equipo de Segunda, en las últimas siete u ocho jornadas hemos aprendido a sufrir y con balón hacemos aún más cosas interesantes", señalaba el técnico burgalés del Elche. "No estamos en tierra de nadie, es un éxito tremendo; estamos haciendo una campaña maravillosa, en la que hemos tenido que levantarnos de muchos reveses como el tema del portero y del nueve (...) estoy maravillado, emocionado, ilusionado de lo que estamos haciendo, tenemos muchos equipos por debajo pese a que somos este año un equipo debutante en la categoría , estamos compitiendo como un equipo de Segunda División, somos un equipo peligroso", insistía Pacheta que ponía el acento en la "valentía" e "ira controlada" de la que había hecho gala su equipo, tratando de tú a tú al Albacete, equipo y afición hacia la que se deshacía en elogios ("No pelea por casualidad el ascenso"), al tiempo que agradecía el apoyo del franjiverdismo que se movilizó y estuvo presente en el Carlos Belmonte en un número cercano a los dos millares.
El entrenador burgalés, que destacaba el papel de un Carlos Castro que "juega dos ratos y nos ha dado ya cuatro puntos", aseguraba que la sustitución de Karim por Azamoum por Manu Sánchez se había debido a la tarjeta amarilla con que contaba el mediocentro cedido por el Cádiz y no a que buscara equilibrar el centro del campo, aunque reconocía que con Manu los suyos habían tenido más el balón y Javi Flores estuvo más liberado.