VALÈNCIA. La ciudad deportiva de Paterna, propiedad del Valencia CF, cumple este sábado treinta años de su inauguración en los que se ha convertido en un vivero de jugadores de primer nivel, muchos de ellos internacionales, que han triunfado no solo en el club valenciano sino en otros de la Liga española y del extranjero.
En los años más recientes de la etapa de Peter Lim como accionista mayoritario del Valencia, el proyecto del club ha variado notablemente, ya que ha pasado de combinar formación y fichajes a reducir a la cantera los recursos para nutrir al primer equipo, ya que la contratación de jugadores ya formados se ha reducido sustancialmente, lo que ha lastrado el potencial del equipo en las dos últimas temporadas a pesar de la calidad de algunos de sus futbolistas en formación.
La escuela ha dado sus frutos con jugadores del actual Valencia como José Luis Gayà, Carlos Soler, Jaume Doménech, Toni Lato o Hugo Guillamón, al igual que otros más jóvenes como Yunnus Musah, Jesús Vázquez o Cristhian Mosquera.
Algunos de los muchos futbolistas que han pasado por Paterna llegaron al club como niños y otros lo hicieron a punto de dar el salto al primer equipo desde el juvenil o el filial, pero, con independencia de la duración de sus diferentes estancias, tanto la élite del fútbol español como la selección están plagadas de jugadores formados en sus instalaciones.
Javier Farinós, Miguel Ángel Angulo, David Albelda, Andrés Palop, David Navarro, Raúl Albiol, Pablo Hernández, David Silva, Vicente Guaita, Jaume Costa, Jordi Alba, Paco Alcácer, Juan Bernat, Rafa Mir, Nacho Vidal, Ferran Torres o Kang In Lee son algunos de los muchos que han crecido personal y futbolísticamente en sus campos de entrenamiento.
La inauguración hace treinta años de la instalación no supuso el comienzo de su uso, que fue anterior y se remonta a 1974, momento en el que el primer equipo del Valencia empezó a trabajar en unos terrenos que habían sido adquiridos por el Valencia CF bajo la presidencia de Francisco Ros Casares en los primeros años setenta del pasado siglo, por lo que el club los utiliza desde hace casi cincuenta años.
La aportación más importante de Ros como presidente del club fue precisamente la compra de unas parcelas situadas a diez kilómetros del centro de la ciudad con el objetivo inicial de que el primer equipo entrenara allí tras más de medio siglo en el campo de Mestalla o en los terrenos posteriores a su grada de general.
El 18 de enero de 1974, una asamblea de socios del club aprobó la adquisición de 350 anegadas en las proximidades de la carretera de Ademuz por un importe de setenta millones de pesetas (algo menos de medio millón de euros actuales), con la remota idea de posteriormente ubicar allí un estadio para 70.000 espectadores.
Sin embargo, esos terrenos no se convirtieron en ciudad deportiva con una estructura similar a la actual hasta hace treinta años, cuando la instalación fue inaugurada como tal el 19 de febrero de 1992.
Previamente, en los últimos años ochenta, las obras de circunvalación de Valencia, conocidas como “by pass”, afectaron a una parte de la instalación deportiva del club, lo que supuso un ingreso de trescientos millones de pesetas (1,8 millones de euros) en concepto de expropiación.
Esta cifra animó a la directiva presidida por Arturo Tuzón a emprender el reto, que fue dirigido por José Domingo, vicepresidente del club, y bajo cuya supervisión se construyó el edificio principal de la ciudad deportiva y el campo anexo (actualmente estadio Antonio Puchades) con capacidad para 3.000 espectadores y donde habitualmente juegan sus partidos el filial Valencia Mestalla y el equipo femenino, Valencia Féminas.
El club invirtió en la instalación quinientos millones de pesetas (tres millones de euros) y la inauguración oficial tuvo lugar en coincidencia con un encuentro internacional amistoso que España disputó en Mestalla ante la Confederación de Estados Independientes (CEI), nombre del estado que sustituyó a la Unión Soviética antes de convertirse en Rusia.
El acto inaugural contó con la presencia, junto al presidente Tuzón, de Joan Lerma, president de la Generalitat, y de Ángel María Villar, de la Real Federación Española de Fútbol.