VALÈNCIA. Victoria muy importante para el Levante UD por la mínima ante el CD Mirandés (1-0) que le permite dormir en la sexta posición tras un fantástico gol de Carlos Álvarez. El tanto del mediocentro fue suficiente para doblegar a los de Lisci, que se vio superado en el banquillo por un Julián Calero que en los cambios le dio la vuelta al guión del partido.

La gran novedad en el once de Julián Calero fue la incorporación del delantero Carlos Espí al equipo. Se trataba de la primera titularidad del canterano levantinista desde que comenzó la temporada pese a las buenas actuaciones del mismo durante la misma. Una decisión que se pedía desde la afición desde hacía ya muchas jornadas y que ha traído cola prácticamente todo el año. Por su parte, Alessio Lisci volvía a la que fue su casa con un Club Deportivo Mirandés que, de ganar, se ponía líder en solitario tras una jornada repleta de pinchazos de los de arriba.

El partido comenzó con el Mirandés controlando el balón y con las ideas más claras sobre el terreno de juego. Además, con la zaga muy atenta a un Carlos Espí que las bajaba todas. No obstante, los primeros minutos del choque denotaron mucho respeto entre dos equipos que se estaban jugando dormir en los puestos más altos de la competición.

No fue hasta el minuto 12 cuando se vio la primera gran ocasión del duelo. El joven extremo Iker Benito aprovechó un desajuste en la defensa granota para colarse con el esférico hasta la cocina, pero su disparo fue repelido a córner tras una gran aparición del capitán Iborra para evitar el primero de los visitantes.

El murmullo en las gradas del Ciutat incrementó con el paso de los minutos porque los locales no terminaban de hacerse con el partido, sobre todo con un centro del campo que no se imponía a los de Miranda de Ebro. De hecho, los levantinistas no terminaban de dar con la tecla y los balones dirigidos a Carlos Espí pocas veces generaban peligro a los de Lisci,

Sin embargo, fue en el ecuador de la primera parte cuando el guión del partido comenzó a cambiar. Carlos Álvarez y Kochorashvili cogieron el timón del choque y dieron un paso adelante tras la gran ocasión de Joel Roca para adelantar al CD Mirandés.

Andrés Fernández, muy atento, mantuvo con vida a los locales que, pese a permitir la ocasión de Roca en una contra de libro, ya había aterrizado en el choque. El mediocentro andaluz se soltó y tuvo en su cabeza el primero para el Levante UD, pero mejor fue su asistencia con el exterior para un Morales que no supo definir ante Raúl Fernández.

Más allá de otra llegada de Roca con peligro que solventaron con solvencia Pampin y Dela, el protagonismo citado con anterioridad del Mirandés se fue disolviendo con el paso de los minutos y el descanso llegó cuando mejor estaban jugando los granota.

Las incursiones del lateral zurdo del Levante dieron más dolores de cabeza que las de un desacertado Manu Sánchez. Sin embargo, ni Morales ni Espí terminaban de conectar el disparo definitivo y se llegó con el empate a cero al término de la primera parte.

El paso por los vestuarios no le sentó nada bien a los de Julián Calero, y al inicio de la segunda parte volvió a ser Joel Roca el que pudo desnivelar la balanza para los visitantes, pero su disparo se fue por el lateral de la red. Minutos después Andrés Fernández volvió a salvar al Levante con una gran estirada que evitó el tanto de Rincón.

Como sucedió también en el primer tiempo, el Levante recuperó algo el control del partido tras un inicio de segunda mitad muy impetuoso del Mirandés, aunque traspasada la hora de partido todavía no había llegado con apenas peligro a la portería defendida por Raúl Fernández.

Sin embargo, un error en la salida de balón de los de Lisci supuso el primer tanto del partido para los levantinistas. Kochorashvili recuperó el esférico en mitad del campo y su pase a Iván Romero desajustó por completo a la defensa visitante. El delantero, recién entrado al campo, le puso la calma suficiente como para esperar a un lanzado Carlos Álvarez que batió por bajo al guardameta en el primer disparo entre palos de los locales.

Tanto Iván como Carlos se entendieron muy bien desde que Calero les juntó en el campo, y ello no permitía que el Mirandés se terminara de volcar en ataque. Los cambios de Algobia y Xavi Grande también le dieron aire fresco al equipo local que, pese a marcar, no se echó atrás y buscó el segundo tanto con ansía. Tanta, que Morales y Kochorashvili desaprovecharon dos buenas ocasiones mandando el balón muy por encima de la meta de Raúl.

El Levante siguió teniendo entre ceja y ceja la portería rival y la presión arriba en la salida de balón ahogaba a los de Miranda, que desde el gol local no terminaban de engancharse al partido de nuevo. Esa desesperación se reflejó en sus futbolistas, sobre todo en la recta final del partido. Fruto de ello Dadie se autoexpulsó en una acción infantil en la que dejó a su equipo con diez en los instantes finales del choque, aunque una jugada calcada de Dela igualó la balanza y pudo costar un disgusto inesperado para los granotas. El Ciutat vibró con el final del partido y despidió al equipo por todo lo alto.

Ficha técnica:

1 - Levante UD: Andrés, Manu Sánchez (Xavi Grande, m.57), Unai, Dela, Pampín, Rey, Iborra (Algobia, m.57), Kochorashvili, Carlos Álvarez (Forés, m.89), Morales (Lozano, m.79) y Espí (Romero, m.57).

0 - CD Mirandés: Fernández, Tomeo (Butzke, m.76), Egiluz, Gutiérrez, Rincón (García, m.87), Benito, Lachuer (Dadie, m.76), Reina, Gorrotxategi (Tachi, m.87), Roca (Izeta, m.67) y Panichelli.

Árbitro: Carlos Muñiz Muñoz (Colegio aragonés). Amonestó a los locales Iborra (m.53), Lozano (m.94) y expulsó a Dela (m.94), al igual que al visitante Dadie (m.93).

Incidencias: Partido de la vigésimo octava jornada de LaLiga Hypermotion disputado en el estadio Ciutat de València.