VALÈNCIA. Pese a los paupérrimos números que ha conseguido el Valencia CF en la primera parte del campeonato (la que se jugó en 2018) lo bien cierto es que tras la victoria agónica ante el Huesca, y sumados una serie de resultados, los de Marcelino llegaron al parón navideño con 22 puntos. Aún habiendo conseguido únicamente cuatro victorias en 17 encuentros (ante Real Sociedad, Getafe, Rayo Vallecano y Huesca), el Valencia CF encabeza un trío de escuadras con 22 puntos que le dejan en la octava posición.
Tan cierto es que una derrota le puede hacer retroceder seis o siete posiciones, como que una victoria en Mendizorroza le puede dejar a tan sólo tres puntos de las posiciones de Europa League a una jornada de finalizar la primera vuelta (sumaría 25 puntos por los 28 actuales del Alavés que es quinto en la tabla). El partido de Mendizorroza puede marcar el esperado punto de inflexión en un sentido o en otro.
En el club se sigue asegurando que el objetivo es volver a clasificarse para la Liga de Campeones, así que la meta debe ser uno de los cuatro primeros lugares de la tabla clasificatoria. Dando por seguros a Barcelona, Real Madrid y Atlético como equipos inamovibles en tres de esos cuatro primeros lugares, es evidente que el Valencia CF plantea la batalla con el Sevilla como rival directo (que ahora mismo es tercero con 32 puntos). Pese a que los de Machín parecen un par de velocidades por encima del conjunto de Mestalla, las tres próximas jornadas se antojan decisivas en saber hasta dónde puede acelerar el Valencia CF y si los de Nervión presentan las suficientes dudas como para creer en una remontada histórica.
El clima de inestibilidad social generado alrededor de la entidad presidida por Pepe Castro debido a una posible venta no va a ayudar en nada al equipo andaluz. Pero ese puede ser un factor a medio-largo plazo en el campeonato y lo más inmediato son los tres próximos enfrentamientos que pueden marcar diferencia.
No es que el calendario del Valencia CF sea sencillo ya que recoge salidas a Vitoria y Vigo, y un encuentro en Mestalla ante el Valladolid. Sin embargo, el calendario para los nervionenses se complica -a priori- mucho más que el de los blanquinegros.
Este fin de semana, se juega la jornada 18 de liga con el desplazamiento del Valencia CF a tierras alavesas el sábado 5 a las 16´15 horas. El Sevilla jugará exactamente 24 horas más tarde. Lo hará en Nervión, pero el rival es el actual segundo clasificado de la Liga, el Atlético de Madrid. Tan sólo hay dos puntos de diferencia entre ambos equipos (32 de los andaluces por 34 de los colchoneros) y para los del Cholo vencer en el Pizjuán serviría para abrir una brecha de 5 puntos justo antes de acabar la primera vuelta.
El sábado 12, el Valencia CF recibe al Valladolid en la jornada 19. Será el tercero de los recién ascendidos que pase por Mestalla (antes lo hicieron Rayo y Huesca) y lo hará -para variar- a las 16´15 horas. También 24 horas más tarde los de Pablo Machín visitan otro estadio con solera de la primera división. Pese a no estar en su mejor temporada, San Mamés no es una cancha fácil para nadie.
Cierra esta trilogía de complicado tránsito para los sevillistas la jornada 20. Mientras el Valencia tiene un difícil examen en Vigo visitando a un revitalizado Celta tras el cambio en el banquillo del turco Mohamed por el portugués Miguel Cardoso, tampoco tiene el Sevilla un parque de bolas programado para ese fin de semana. El Real Madrid recibirá a los de Machín en la primera jornada de la segunda vuelta en el Bernabéu para intentar asaltar la tercera plaza.
Por tanto el calendario ofrece en las tres próximas jornadas una oportunidad para recortarle al Sevilla los diez puntos que los hispalenses han puesto de por medio con el Valencia. El calendario de los del Nervión es complicado, pero todo pasa porque el Valencia cumpla su parte del contrato: ganar. Si los hispalenses tropiezan y el Valencia no comienza a encadenar triunfos, de poco o nada servirá tener una fase propicia con peor calendario para el rival. Pasadas estas tres jornadas tendremos una buena medida de las posibilidades del Valencia CF en lo que queda del campeonato y sabremos si será hora de mantener el rumbo fijo hacia el objetivo de la Champions o si habrá que buscar un itinerario de menos entidad para los de Marcelino.