El jugador del Valencia Basket habla con Plazadeportiva.com acerca de la Copa del Rey y el papel protagonista que está teniendo en el equipo tras su renovación el pasado verano
VALÈNCIA. Will Thomas es ya todo un veterano en la Copa del Rey con Valencia Basket. El jugador de Baltimore va a cumplir su tercera participación con la camiseta taronja, aunque será la cuarta en total, pues jugó en una ocasión con la del Unicaja. Actualmente está siendo el máximo referente del equipo que dirige Jaume Ponsarnau junto con Bojan Dubljevic y es consciente de que para ganar a todo un Barça en cuartos de final y aspirar al título, deberán igualar el tono físico.
El jugador admite que “es un objetivo ganar la Copa del Rey”, pues cree que tras empezar la temporada “faltos de ritmo”, en los últimos dos meses el equipo ha cogido “tono” y este título es “una gran oportunidad”. Aunque lo cierto es que llegan con ciertas dudas tras las dos derrotas seguidas en Liga Endesa, Will recuerda que “hemos jugado muchos partidos fuera de casa, mucho viaje, que nos ha impedido entrenar bien” y les ha provocado llegar a estas alturas “un poco bajos de energías”. El ala-pívot ha señalado especialmente a los jóvenes, a los que les afecta mentalmente por la falta de experiencia. Eso sí, no duda que para el jueves habrán recuperado esa energía que le falta a la plantilla.
Will no cree en que en la Copa incidan las dinámicas. Valencia Basket partía como favorito ante Tenerife y se fue a casa a las primeras de cambio en la pasada edición y el Barça, en una situación crítica y habiendo cambiado al entrenador justo antes, se acabó alzando con la Copa contra todo pronóstico. “Cualquier cosa puede pasar en la Copa y eso es lo mejor que tiene. Eso es lo que más motiva. Solo tienes que jugar bien tres partidos y puedes ganarla”, insiste el de Baltimore.
Muy diferente al del año pasado es el Barça que se presentará el jueves contra el equipo taronja. A los mandos de Svetislav Pesic desde hace justo un año, han demostrado ser uno de los equipos más fuertes en Liga, donde van líderes, y en Euroliga, donde están en puestos de playoff. Will admite que “están jugando muy bien, sólidos y con mucha confianza”, que tendrán que “romper para poder ganarles”. Pero si hay algo que preocupa de los blaugrana es que “tienen mucho talento, habilidades, físico, juegan muy agresivo en defensa y en ataque”. El norteamericano lo tiene claro: “Tendremos que igualar el tono físico del Barça para ganarles”.
Aunque no solo será necesaria la energía suficiente para estar al mismo nivel que el rival. Ponsarnau lleva tiempo pidiendo que determinados jugadores den un paso adelante. Entre una cuestión de confianza o de juego, Will Thomas piensa que esos jugadores necesitan “encontrar su rol en la pista, entender lo que tienen que hacer”.
Algo que ha encontrado de maravilla el ala-pívot esta temporada. La temporada 2016-17 hizo 6,7 puntos por partido, la pasada subió a 8,5 y en esta lleva de momento 11,7 puntos por encuentro. Casi el doble de los que hacía en su primer campaña. “El entrenador tiene mucha confianza en mí. Hemos estado juntos dos años desde que llegamos a Valencia. He entrenado mucho con él y en los partidos he ido creciendo, lo que me ha dado más confianza”, admite Will.
Ponsarnau ha cumplido su palabra. En el acto de renovación este verano, el jugador aseguró que el técnico le había prometido que su rol en el equipo iba a cambiar y que iba a tener más protagonismo en la pista y así ha sido. Will explica que este no fue el único motivo por el que decidió quedarse en Valencia. El de Baltimore bromea con que el entrenador podría habérselo prometido y no haberlo cumplido. “Para mí lo más importante es jugar al máximo nivel y en el Valencia Basket con la ACB y la Eurocup lo estoy haciendo”, indica el jugador sobre el hecho de que en su decisión lo más importante (o lo único importante) no era disputar Euroliga.
En lo personal, Will es un jugador que despierta más fobias que filias por su seriedad. Preguntado sobre si se considera una persona seria, es tajante: “No lo soy”. Habrá que preguntar a sus compañeros. Pero la realidad es que el jugador rehúsa de hacerse fotos con los aficionados, firmar autógrafos, etc. Algo que para la mayoría de gente cree que va implícito en el trabajo de un deportista profesional. Para Will no. El de Baltimore piensa que es algo que excede sus responsabilidades como jugador, que se basan en dejárselo todo en la pista y que no está obligado a tener ese tipo de relación con el aficionado. Sea como fuere en el ámbito personal, el de Baltimore está sosteniendo al equipo esta temporada y su compromiso es más que intachable.