El cien y el cero

VALÈNCIA. Mañana comienza la pretemporada 2021/22 para el Valencia CF y lo hace sin novedades para José Bordalás; es decir, sin entradas ni salidas.

De las salidas no es complicado aventurar por dónde van los tiros La gran esperanza es colocar a Guedes aunque la Euro no haya servido lo más mínimo (más bien al contrario) para revalorizar al portugués. Al seleccionador portugués no le valió la del mal estudiante (apretar al final para maquillar el curso) para darle minutos en un torneo de tal magnitud. Tras la voluntad del club de vender a Guedes (bueno, realmente la voluntad del club es vender a cualquiera por el que se presente una oferta) encontramos a Wass. El danés está decidido a poner punto y final a su etapa en Mestalla y es -en estos momentos- quien más pretendientes tiene. El club lleva diciendo un año que trabaja en su renovación, pero esta es la hora en la que nadie le ha hecho una propuesta al danés. Su futuro no parece pasar por Valencia.

Y luego están las llegadas. Bueno, los rumores de llegadas. El club televisa sus reuniones y hasta el interés por los futbolistas (hay tres que no dejan de sonar: Alderete, Juan Iglesias y Marcos André) ¿Es bueno que suenen nombres? Sí, seguro. Lo que ocurre es que el año pasado también sonaron Pepe Reina, Pezzella o Capoue y al final no vino ni el Tato. Cabe preguntarse en qué medida el club televisa sus movimientos (hasta un viaje a Madrid para hablar de Juan Iglesias) por un cambio de tendencia encaminado a darle herramientas al nuevo entrenador, o simplemente es para dar la impresión de que se mueven y no se va a dar lo del verano pasado. Ojalá sea lo primero, pero no soy el tipo que más crea en Peter y su muchachada.

Me ocurrió exactamente lo mismo cuando Meriton presentó la semana pasada y sobre la bocina el proyecto para el Polideportivo de Benicalap: desde el minuto 1 olía a maniobra para ganar tiempo (incluso en el Ayuntamiento). En cuanto los técnicos municipales revisaron la propuesta no hubo lugar la duda: se trataba de la enésima muestra de la desvergüenza a la que nos hemos acostumbrado desgraciadamente por parte de quienes están destrozando el Valencia CF.

Como entiendo que habrá a quien le faltarán segundos para confundir la crítica a los gestores con los deseos de que el equipo pierda partidos (esta demagogia es tan antigua como recurrente), dejaré bien claras las cosas: creo al 100 % en Bordalás y deseo que gane todos los partidos al frente del Valencia CF, pero creo un 0% en Meriton y deseo que desaparezcan del Valencia CF si es posible hoy, que no sea mañana (aún siendo consciente de que ahora eso mismo es ciencia-ficción).

Y no se engañen -o mejor dicho, que no les engañen- ambas cosas son compatibles (creer al 100% en el entrenador y al 0% en quién manda en el Valencia), aunque los repartidores de carnets anden ahora victimizándose cuando los hechos los han dejado con el culo al aire. Ellos, que corrieron a ser la Santa Inquisición asiática (siempre escondidos en perfiles anónimos de redes sociales), ahora no tienen cómo justificar su sumisión a una causa ya sin recorrido. Los acosadores señalados ahora se victimizan. En breve fundarán su iglesia, es cuestión de tiempo.

PD: los inquisidores a sueldo que trabajan en el gabinete de incomunicación del club prefieren que cualquiera entreviste a Bordalás (que es lo lógico), excepto 90 Minuts. Sólo espero que la intoxicación -en la que son maestros- no llegue a influir en la percepción sobre el deseo de la mejor de las suertes para el entrenador alicantino. Allá cada uno con la conciencia de jugar con el pan de la gente (o mejor dicho, de intentarlo).