ALICANTE. Nueva reunión de Enrique Ortiz y Toni Freixa en el estadio Rico Pérez. A la reunión asisten también el presidente de la Fundación, Valentín Botella, y Carlos Parodi, consejero delegado del club.
El empresario, dueño 'de facto' del Hércules y que ya ha regresado de sus vacaciones en Baleares, y el abogado barcelonés están reunidos desde las doce de la mañana en la sede social del club.
Ortiz y Freixa tratarán de avanzar en la negociación que mantienen desde hace casi un mes para que el segundo asuma la gestión del club blanquiazul, con la intención de enderezar el rumbo en lo económico y deportivo, pensando en una venta a medio plazo, si no llega antes una oferta que satisfaga las exigencias del primero ("De gente seria y con garantías para afrontar las obligaciones que conlleva el Hércules", ya se sabe).
El de este miércoles será el tercer encuentro cara a cara de ambos en apenas dos semanas, aunque han mantenido contacto telefónico permanente, tanto antes como especialmente después de reunirse por primera vez hace 13 días, con Valentín Botella, el presidente de la Fundación del Hércules, como enlace.
El desenlace (tanto en un sentido como en otro) de la negociación entre Ortiz y Freixa resulta clave para que el Hércules deje atrás de una vez el bloqueo institucional que afecta, especialmente, a la planificación deportiva: el equipo está viendo como se le escapan algunos de los objetivos que el director deportivo Carmelo Del Pozo tenía en su agenda como refuerzos para la campaña 2021/22, al tiempo que ha perdido la posibilidad de seguir contando con futbolistas como Ismael Falcón y Benja Martínez, que han fichado por el Atlético Sanluqueño y el Intercity, respectivamente.
La parálisis es tal que el club no ha comunicado a ninguno de los ocho futbolistas que tienen contrato en vigor para la próxima temporada sus intenciones, aunque la hoja de ruta parece muy clara: el primer paso será que acepten una rebaja salarial o una baja voluntaria (incentivada), en función de si cuentan o no. Aquellos que no entren en los planes de la dirección deportiva y tampoco se avengan a poner fin de manera anticipada a su contrato, serán incluidos en un Expediente de Regulación de Empleo.
La nómina de mayo, pendiente de abonarse
Ligado a la negociación con Freixa pero también a la resolución (o no) de la sociedad 'blanquiazul' entre Ortiz y Juan Carlos Ramírez, ha surgido un nuevo problema consistente en la demora en el pago de la nómina del mes de mayo. Lo anterior ha causado preocupación en muchos empleados del club (especialmente entre los trabajadores no vinculados estrictamente al área deportiva), aunque desde el Hércules aseguraban este martes que todo se resolverá en breve. Al parecer, se estaba pendiente de cerrar la liquidación de la temporada, algo imprescindible para que Ortiz y Ramírez, en el marco del auxilio económico que protagonizan (sin el que el club no podría levantar la persiana cada día), pudieran conocer el importe exacto de la última inyección de tesorería a realizar en el curso 2020/21 (en el caso del empresario vasco puede ser la última para siempre, pues se resiste a participar de este auxilio económico en la 2021/22; de hecho, una de las vías que ha explorado Freixa estas semanas es la de encontrarle un nuevo socio a Ortiz).
