Hoy es 4 de octubre
VALÈNCIA. La alcaldesa de València, María José Catalá, aseguró este viernes que está trabajando con Vox para llegar a un acuerdo sobre el Nou Mestalla en el que Peter Lim, el máximo accionista del Valencia CF, no recupere los beneficios urbanísticos “sin comprometerse a nada”, ya que recalcó que el empresario singapurense “se ha ganado a pulso tener que demostrar mucho”.
“Yo voy a poner todo de mi parte para que el Nou Mestalla se haga y eso no implica, y nunca implicará, darle ninguna ventaja a nadie, sino hacer cumplir con la ciudad de València. Estoy convencida de que vamos a ver el Nou Mestalla pero eso no va a implicar nunca que para eso le vaya a dar ningún beneficio a la propiedad del Valencia”, recalcó Catalá entrevistada por la Cadena Cope un año después de su nombramiento como alcaldesa.
Así, afirmó que la propiedad del Valencia “se ha ganado a pulso tener que demostrar mucho que va muy en serio” y “lo va a tener que demostrar porque desde luego el incumplimiento ha sido reiterado”.
Catalá destacó que no llegará el 3 de agosto “sin que el Ayuntamiento tome decisiones” para que la propiedad del Valencia CF “no consiga todos las ventajas urbanísticas que implica el alzamiento de la suspensión de licencias que se estableció en un decreto del Gobierno valenciano de Ximo Puig que deroga la ATE, pero no deroga el plan ATE”.
“Yo ya dije que no íbamos a llegar allí sin que el Ayuntamiento diera un paso en cualquier dirección. Y ahora estamos trabajando con Vox para llegar a un acuerdo en ese sentido y que la propiedad no recupere los beneficios urbanísticos sin comprometerse, reprender las obras del estadio y cumplir definitivamente con la ciudad de València”, subrayó Catalá.
Asimismo, insistió en que le da “rabia” cuando alguien llegado de fuera de la ciudad le pregunta cuándo se va a acabar el estadio: “Llevamos tanto tiempo mostrando esa imagen de esta ciudad en uno de sus accesos principales… me da tanta rabia”.
“A los románticos nos encanta Mestalla, pero el antiguo Mestalla tiene una orden judicial para derribar una parte del graderío y hay una operación que tiene que realizarse. Y también es verdad que la ciudad no puede permitirse seguir teniendo el nuevo estadio en esas condiciones en uno de los accesos de la de la ciudad”, concluyó.