VALÈNCIA. El Hércules, tras el fracaso deportivo en la primera parte de la competición, inicia este domingo con su visita al Lleida la segunda fase con el objetivo de alcanzar una de las dos primeras plazas que den opción a disputar la Liga Pro que le permita redimirse y evitar una debacle histórica.
El equipo alicantino, que estaba diseñado para pelear por el ascenso a Segunda, tiene por delante ocho jornadas para no caer a la Segunda Liga Pro, la cuarta categoría del fútbol español, lo que significaría su peor situación deportiva desde su etapa fundacional.
El Hércules se enfrentará en las próximas jornadas a varios rivales catalanes que tradicionalmente no se le han dado bien, comenzando por el Lleida, otro equipo programado para ascender que ya solo se puede conformar con el premio menor.
El encuentro llega tras una semana de resaca por las duras palabras del director deportivo, Carmelo del Pozo, quien responsabilizó exclusivamente a los jugadores del batacazo deportivo tras caer en La Nucía.
El Hércules, que ha enlazado tres derrotas consecutivas, afrontará este partido con el alta del delantero uruguayo Rodrigo Pastorini, reciente fichaje del club para cubrir la ausencia de Javier Acuña, baja para toda la temporada por una lesión en la rodilla.
El técnico Manolo Díaz recupera al portero Ismael Falcón y el lateral Raúl Ruiz para esta primera final ante el Lleida, en la que no estarán por lesión Jon Erice y Moisés García.
El Hércules, con dos partidos menos que sus rivales catalanes, parte con ligera desventaja por lo que está obligado a sumar de tres en tres para recortar distancias y no descolgarse en las primeras jornadas de la lucha por las dos únicas plazas que dan opción a la Liga Pro.
La posible alineación del Hércules será la formada por Falcón; Raúl Ruiz, Tano Bonnín, Romain Correia, Álex Martínez; Pedro, Armando, Appin, Borja, Moyita y Benja.