VALÈNCIA. El Valencia, con su triunfo de este lunes en el derbi ante el Levante por 3-4, ha encadenado tres victorias seguidas en la Liga, algo que no conseguía desde hace dos años y medio y que le ha situado en posiciones europeas.
Antes de imponerse en el duelo de la ciudad de València, el equipo de José Bordalás venció en el campo del Celta de Vigo y ganó en Mestalla al Elche. La última vez que el equipo enlazó tres triunfos seguidos en la Liga fue en el final de la campaña 2018-19, cuando venció al Huesca, al Alavés y al Valladolid para asegurarse la clasificación para la Liga de Campeones.
La actual racha de triunfos ligueros es, además, de siete encuentros seguidos sin perder porque antes de visitar Balaídos, el equipo acumulaba cuatro choques sin conocer la derrota, tras haber sumado previamente tres empates y una victoria.
El número de triunfos seguidos del Valencia es en realidad de cinco si se cuentan los dos que ha conseguido en la Copa del Rey, en la que se impuso en los campos del Utrillas y del Arenteiro para pasar las dos primeras rondas del torneo.
Además, el Valencia no conseguía encadenar dos triunfos a domicilio en LaLiga desde hace tres años, ya que la última vez que lo consiguió fue en el tramo final de la campaña 2018-2019 cuando se impuso al Betis en el Benito Villamarín por 1-2 y a continuación goleó al Huesca por 2-6 en El Alcoraz.
Desde entonces había sido incapaz de encadenar dos victorias ni en la temporada 2019-2020, en la que solo ganó tres partidos lejos de Mestalla en toda la Liga, ni en la pasada en la que apenas salió victorioso en dos compromisos a domicilio en todo el campeonato.
Ahora por delante tiene como objetivo alcanzar los cuatro triunfos consecutivos del curso 2017-2018, con Marcelino en el banquillo, que es el mejor registro de la última década, cuando se impuso a la Real Sociedad (2-3), Betis (3-6), Alavés (1-2) y Espanyol (0-2) en un espectacular arranque liguero.