VALÈNCIA. Esbozó por fin el valencianismo una sonrisa en la liga después de estar casi tres meses sin conocer el triiunfo. La victoria en Mallorca devuelve cierta tranquilidad a un entorno tensionado por los roces entrenador-directiva y por la falta de buenos resultados en la competición de la regularidad.
Afrontar la vuelta de las semifinales con un triunfo en el zurrón, es mucho más positivo -sin duda- que haberlo vuelto a hacer con la carga negativa de otra derrota.
Con vistas al encuentro del miércoles, otra derrota hubiera enrarecido demasiado un ambiente que se pretende que sea histórico para alcanzar la gran final.
Todo el entorno entiende como un signo de optimismo haber conseguido un triunfo en el partido previo a la disputa de la vuelta de las semifinales de Copa ante los vascos. Sin embargo los números dejan al descubierto que ganar el encuentro previo a la vuelta de las semifinales de Copa del Rey no garantiza de ningún modo el pase a la final.
La historia así lo demuestra desde que Copa y Liga se juegan al mismo tiempo. Hay que recordar para los más jóvenes que hasta principios de la década de los 80 la Copa se disputaba en casi su entera totalidad al finalizar la liga. Por tanto, para las semifinales de la copa del 79 que finalmente ganó el Valencia CF, las semifinales ante el Valladolid se disputaron 20 y 24 de junio cuando el campeonato liguero vivió su última jornada el 2 de ese mismo mes.
Así que para poder realizar la comprobación de la que estamos hablando (ganar el partido de liga previo a la vuelta de semifinales no garantiza la final) tendremos que acudir por primera vez a la temporada 89/90. El Valencia perdía 2-1 en el Camp Nou ante el Barça en la ida de semifinales de la Copa disputada el 7 de febrero de 1990. Antes de afrontar la vuelta el equipo viajó en liga a La Romareda de Zaragoza donde venció por 0-1 con gol de Lubo de Penev el 25 de febrero. Para la vuelta Mestalla registró un ambientazo que se tornó en decepción al no poder pasar del empate a 1 ante los azulgrana en partido disputado el 25 de febrero. Los de Mestalla se quedaron sin final.
Algo parecido ocurrió en la temporada 92/93. El 10 de junio de 1993 el Valencia CF empataba a 1 en Mestalla en la ida de las semifinales de Copa del Rey ante el Real Zaragoza. La vuelta sería el 17 de ese mismio mes, pero antes el equipo visitaba Cádiz en una de las últimas jornadas del campeonato liguero. El 13 de junio los de Hiddink vencían por 0-2 con goles de Leonardo y Carlos Arroyo. Sin embargo, 4 días más tarde el Zaragoza se imponía 3-2 en La Romareda y dejaba a los valencianistas sin final.
Esta vez ganar si fue el preludio de una final copera. El equipo presidido por Paco Roig y entrenado por el campeón del mundo Carlos Alberto Parreira juega la ida de las semifinales de Copa en Mestalla ante el Albacete. El partido se disputa el 31 de mayo y finaliza con empate a 1 gol y una bronca monumental hacia Parreira. El descontento es de tal magnitud que a la mañana siguiente Roig destituye a Parreira y coloca en su lugar al técnico de la casa José Manuel Rielo. Con el de Xàxtiva en el banquillo el equipo vence en liga el 10 de junio el partido previo a la vuelta de las semifinales de Copa por 4-1 a la SD Compostela (con hat trick de Lubo Penev y un gol de Fernando). La vuelta de las semifinales el 13 de junio en el Carlos Belmonte se resuelven con victoria del Valencia ante el Albacete por 1-2 con tantos de Robero y Lubo Penev. Esa noche el Valencia consiguió billete para la final del agua contra el Depor de infausto recuerdo.
En esa campaña el equipo de Luis Aragonés fue solidificándose a medida que pasaban los meses y llegó hasta las semifinales de Copa. Lo hizo ante el Atlético de Madrid de Antic (el equipo más en forma de aquel año). La ida se disputó en Mestalla y dejó muy complicadas las cosa para la vuelta. En encuentro jugado el 21 de febrero los rojiblancos vencían 3-5 en Mestalla. Antes de acudir a buscar la heroica a orillas del Manzanares el Valencia cogió moral derrotando en el antiguo Luis Casanova al Oviedo por 3-1 con goles de Mijatovic, Poyatos y Arroyo en un partido jugado el 25 de febrero. El 29 llegaba el partido del Calderón y el Valencia de Luis acarició la proeza pero se quedó a un sólo gol; 1-2 y otra final que se volvía a escapar.
La Copa de Ranieri y del Piojo. Comenzó con un bombazo y una de las noches más felices de Mestalla en mucho tiempo. La fecha de la ida disputada ante el Real Madrid está marcada en la historia del club: 9 de junio de 1999. El resultado: Valencia CF 6-Real Madrid 0. La noche del “sois San Marino” dejó al equipo una dulce resaca que fue incapaz de superar. En liga y 4 días más tarde caía derrotado 3-2 ante el Tenerife. Sin embargo, esa derrota no significó nada de cara a la vuelta en la que los de Ranieri (con gol del Piojo) encajaron una cómoda y dulce derrota en el Bernabeu por 2-1 en partido jugado el 16 de junio. El resto, la final de La Cartuja, es también historia del club blanquinegro.
Hay que esperar casi 10 años para volver a ver al Valencia CF en unas semifinales de Copa del Rey. Y se presenta en ellas de la mano del controvertido Ronald Koeman en un año que el rendimiento en liga fue desastroso. Las semifinales de Copa fueron ante el Barça. La ida se jugó el 27 de febrero y el resultado final fue de 1-1 con gol de Villa en el Camp Nou y un polémico gol de Eto´o que se ayudó claramente de la mano para empatar en el descuento. Antes de jugarse la vuelta en Mestalla y el 15 de marzo, el Valencia recibió al Sevilla en plenas Fallas y el triunfo fue para los visitantes por 1-2. Sin embargo, la traca gorda esperaba el 20 de ese mismo mes en el que los valencianistas derrotarían por 3-2 al Barça con un gol estratosférico de Baraja y doblete de Juan Mata. De ahí, a la final del Calderón con triunfo 3-1 ante el Getafe y cuatro días más tarde destitución de Ronald Koeman. Eso sí, la Copa al zurrón.
La única ocasión en que Unai Emery llegó con el Valencia CF unas semifinales de Copa le tocó enfrentarse al FC Barcelona. La ida se jugó en Mestalla el 1 de febrero y finalizó con empate a 1 gol. Antes de disputarse la vuelta, los blanquinegros acuden al Calderón el 5 de febrero y cosechan una igualada sin goles ante el Atlético. Sin embargo, cuando acuden el 8 de febrero a la vuelta al Camp Nou son derrotados con facilidad por 2-0 y apeados de la posibilidad de jugar una final.
Temporada “made in Meriton” para olvidar. Ni siquiera unas semifinales de Copa endulzan el desastre de gobierno de los actuales gestores del club. Con un comentarista televisivo sentado en el banquillo por ser amigo del propietario (Gary Neville), el equipo llegó hasta la ida de las semifinales de Copa del Rey jugada el 3 de febrero de 2016. Fecha negra para la historia del club. Un Barça a medio gas le enchufaba un 7-0 humillante al Valencia. El resto no tuvo ya ningún peso. Ni la derrota en liga 1-0 ante el Betis el 7 de febrero, ni la vuelta con 1-1 (ambos equipos alinearon todos los suplentes) disputada el 10 del mismo mes.
Con la capitulación temporal del desastre de Meriton delegando el club en manos de Mateu Alemany y Marcelino, el Valencia vuelve a unas semifinales de Copa. La ida se juega en el Camp Nou el 1 de febrero de 2018 y pese a las bajas, los de Marcelino aguantan el vendaval y pierden por la mínima, 1-0. Antes de jugarse la vuelta, el equipo confirma que no pasaba por su mejor momento de forma (trufado además de una importante lista de bajas) y pierde 3 días más tarde en la liga 1-0 en su primera visita al Metropolitano ante el Atlético de Madrid. A la vuelta el 8 del mismo mes el equipo demostró que estaba cerca, pero que todavía no estaba aún para competir con los grandes. Los de Valverde se impusieron por 0-2 y se ganaron un puesto en la final.
La Copa del Centenario. Tan mágica como nostálgica teniendo en cuenta los oscuros días que se viven en la actualidad. Con un equipo al que le costó cogerse, pero que en cuanto cogió la velocidad de crucero fue imparable. La ida de semifinales se jugó en el Villamarín ante el Betis el 7 de febrero y el equipo empató a 2. Pese a partir con un 2-0 en contra, los cambios en la segunda mitad hicieron reaccionar a los valencianistas que con goles de Cheryshev y Gameiro igualaban el partido para dejar al equipo muy cerquita de la final que se disputaría tres meses más tarde en ese mismo estadio. Antes de afrontar la vuelta el Valencia tiene un semi tropiezo en liga al empatar a 1 el 24 de febrero en cancha del Leganés. Pese a avanzarse 0-1 con gol de Kondogbia, el equipo se tiró excesivamente atrás y acabó concediendo un empate que dificultaba un tanto su clasificación para Champions (que a la postre también acabó consiguiendo). La vuelta de las semifinales el 28 de febrero en Mestalla fueron una fiesta plena que se completaron con el gol de Rodrigo que sirvió para derrotar 1-0 al Betis y ganar un lugar en la final. El resto (por más que algunos lo quieran borrar) es una de las páginas más bellas de la historia del club al derrotar en la final al Barcelona de Messi y alzar el trofeo en el año del Centenario.
Falta saber qué ocurrirá el miércoles. De momento, y como se dice en valenciano “lo que davant, va davant”. Mejor presentarse a la cita con la alegría del triunfo que con las dudas por otra nueva derrota.