El Levante, a ritmo de récord de lesiones
Por
| 14/09/2021
VALÈNCIA. La caída de Roberto Soldado a la enfermería del Levante es la trigésimo cuarta en Buñol en lo que va de temporada. El delantero, con una microrrotura en el isquiotibial del muslo izquierdo, se perderá la próxima visita del Villarreal y posiblemente la siguiente, del Barcelona, al Ciutat de València. Junto a él, hoy completan el sanatorio Óscar Duarte, Carlos Clerc (ambos con problemas de rodilla) y los últimos en caer: Dani Gómez -que es seria duda para el regreso de Liga tras parón- y Jorge De Frutos. El segoviano es la gran bomba en el dique seco: dirá adiós a lo que resta de curso tras ser intervenido en Madrid.
Con ese dibujo, no es precisamente el Levante el equipo más afectado por las lesiones en la foto actual de la campaña. Guarda cinco jugadores en el dique seco. Sin embargo, sí está a la cabeza de las plantillas que más han sufrido en cuanto a dolencias de distinta gravedad y molestias musculares que han obligado a sus piezas a ausentarse de convocatorias. Tanto Paco López, como Javi Pereira o Alessio Lisci han tenido problemas de acumulación de efectivos en la grada y este es un problema ya viejo y conocido en el seno de la entidad de Orriols.
Ya en la segunda parte de la pasada temporada, a estas mismas alturas, el Levante amontonaba una cifra parecida de caídas en batalla. Aunque menor. Con Campaña como principal dolor de cabeza por sus superados problemas de isquios que también le hicieron pasar por quirófano, el equipo de Paco López inició el mes de abril de 2021 con 24 futbolistas que se habían unido a la lista de ausencias a lo largo del curso. La gran mayoría con partes médicos, otros sin ellos debido a caídas de última hora en convocatoria y/o celeridad en la recuperación de problemas musculares que, aún con esas, computaron en el número total.
Tan notorio y evidente es el obstáculo en este sentido en el cuadro granota que ya la presente campaña arrancó a un ritmo preocupante. Durante el stage de pretemporada en La Finca cayó Álex Blesa. El canterano, ya como parte del primer equipo, abrió la veda con un esguince de rodilla que le dejó 8 semanas KO, algo que trastocó en parte sus planes de futuro ante la competencia en la medular de los mayores. Le siguió Postigo, con otro esguince en el amistoso en Southampton y, nada más arrancar el campeonato de Liga, cayeron Soldado y Dani Gómez. El ariete valenciano, tras lesionarse de aductor e isquios en Cádiz, se perdió hasta siete encuentros.
Aquella fue la lesión más alarmante del inicio de un curso que no ha dado tregua en el sanatorio levantinista. A estas alturas de concurso, las 34 lesiones que ha padecido el equipo hasta ahora es el montante más grueso de los últimos años. Aitor Fernández, Coke, Pepelu, Cantero, Son y Cáceres -aunque en el caso del charrúa, con menos margen tras incorporarse a la disciplina de Alessio en febrero- son los jugadores que no han presentado ninguna dolencia física que les haya forzado a perderse un choque esta temporada. A ellos hay que sumar dos asteriscos: Marc Pubill y Chelo Saracchi.
El canterano ascendió a la dinámica permanente del primer equipo tras la llegada de Alessio al banquillo del Ciutat y, sin computar como caso durante el total del curso, tampoco ha causado baja por lesión muscular. Saracchi, por su parte, llegó al club en plena recuperación de la rotura del ligamento cruzado de su rodilla izquierda el pasado verano, mientras militaba en las filias del Leipzig. Una lesión que no computa en el cálculo actual al haberse producido fuera de las fronteras granotas, aunque sí ha sido ausencia mientras ha durado su proceso de vuelta en la Ciudad Deportiva de Buñol.
Esta es la lista de bajas del Levante esta temporada tras la disputa de la jornada 29 y la nueva caída de Soldado. Computan tanto partes médicos como dolencias y molestias musculares que han obligado a reservar futbolistas en la previa de una cita. No se tienen en cuenta bajas por coronavirus: