ELCHE (EFE). El centrocampista del Elche Kike Pérez recordó este miércoles, en rueda de prensa, que el objetivo de la permanencia en Primera no está aún asegurado por el equipo, por lo que indicó que no se pueden relajar en las jornadas que restan para la conclusión del campeonato.
“Hay que ir partido a partido”, dijo el jugador, quien apeló a la “humildad” para ganar a Osasuna, próximo rival, en una jornada que puede dar la salvación matemática al Elche si gana y acompañan los resultados de sus rivales directos.
“No nos podemos relajar y vamos a intentar ganar todos los partidos que podamos hasta el final de la temporada”, comentó Kike Pérez, quien dijo que el estado de ánimo del Elche es “alegre” y que el grupo tiene ganas de conseguir “cuanto antes” la permanencia.
El jugador toledano, que llegó al club en el pasado mercado de invierno en calidad de cedido por el Valladolid, se ha ganado la titularidad en las últimas jornadas, en las que asegura que se ha encontrado “bien”.
“Necesitaba esa confianza para dar todo lo que tengo”, confesó el jugador, quien elogió el ambiente que existe en el vestuario y agradeció el trato recibido de parte de todos los estamentos del club desde su llegada.
Kike Pérez receló de la situación de Osasuna, ya que afirmó que pese a que el equipo navarro no tiene urgencias clasificatorias “no nos va a regalar el partido”.
“Saldrán con intensidad y será un partido complicado”, pronosticó el centrocampista, quien confió en que el equipo ilicitano pueda repetir el partido que realizó en su último encuentro como local ante el Mallorca.
En relación a su futuro en el Elche, el jugador recordó que “no depende de mí”. “Los clubes se tienen que poner de acuerdo. Veremos qué me depara el futuro. Yo estoy centrado en Osasuna, que lo tenemos ahí”, indicó el toledano, quien precisó que aún no ha podido demostrar su verdadero potencial.
“Llevo poco tiempo, tres meses y queda mucho por demostrar. Al principio jugué poquito y ahora con confianza estoy teniendo más opciones”, explicó el jugador, quien deseó que su compañero Lucas Olaza, quien también llegó al club en diciembre, acabe encontrando pese a la competencia “su huequecito para entrar en el equipo”.