La malversación por traspasos del Marsella alcanzó 64,6 millones de euros

VALENCIA. Las malversaciones de fondos en los traspasos del Olympique de Marsella (OM) superaron los 64,6 millones de euros, según las estimaciones del juez instructor que dirige las investigaciones, publicadas hoy por "Le Canard Enchaîné".

La revista satírica presentó hoy una tabla con fecha del 1 de octubre de 2015 que figura en el dossier de la instrucción del juez Guillaume Cotelle y que recopila el trabajo de los policías que trabajan desde hace cinco años en las pesquisas sobre los el falseamiento de las cuentas de los traspasos realizados entre julio de 2009 y enero de 2012.

El monto total de la "estimación del perjuicio" para el club es de 64.647.380,94 euros, de los cuales casi 27 millones corresponden a la operación que implicó al delantero André Pierre Gignac, comprado por el OM al Toulouse en agosto de 2010.

El Toulouse había fijado un precio para vender a Gignac de 15,5 millones de euros, pero el costo para el club de Marsella se disparó por las diferentes comisiones que se repartieron -diversas primas disimulaban el salario real-, de acuerdo con las conclusiones de los policías.

Ese mismo mes de agosto también se formalizó el contrato de Loïc Remy, con un perjuicio de 856.000 euros.

Cotelle anotó en el dossier de instrucción al respecto que "la situación contable consecutiva a las transferencias de Gignac y Rémy (era) tan chocante que la presentación de cuentas tuvo que apañarse para que pudiera aparecer más presentable para el accionista".

Otras operaciones con desvíos de dinero millonarios fueron las de Lucho González en julio de 2007 (8.405.760 euros), Mbia ese mismo mes (2,5 millones), Diawara también en julio de 2009 (3.714.720 euros), Niang transferido a Fenerbahce en agosto de 2010 (3.495.000 euros) o Ben Harfa en enero de 2011 (3,2 millones).

También las de Diawara en noviembre de 2011 (3.144.900 euros) o la de González, transferido al Oporto en enero de 2012 (3,5 millones).

A la vista de esas cantidades, los investigadores hicieron notar que "las sumas considerables que circulan en el fútbol profesional no pueden escapar al apetito insaciable de la delincuencia organizada. Los circuitos financieros elaborados permiten a los beneficiarios probablemente blanquear sumas salidas de la extorsión, del ejercicio ilegal de la profesión de agente y sin duda de otras infracciones financieras".

Ninguno de los jugadores implicados ha sido todavía interrogado por los jueces, que reservan esos trámites para la fase final de la instrucción, según "Le Canard Enchaîné".

El que era presidente del Marsella en el momento de los hechos, Jean-Claude Dassier, consideró que las revelaciones del semanario son "un tejido de tonterías", en declaraciones a la emisora "France Info".

Dassier consideró que lo obtenido por "Le Canard Enchaîné" son "una sucesión de errores, de cifras falsas y de informaciones falsas" y aseguró que había dirigido siempre el club "con seriedad, honestidad" y respetando absolutamente las reglas.

El expresidente, que está imputado, dijo no tener miedo por las decisiones del juez instructor.