La diosa fortuna ha decidido darle la espalda al Valencia CF en la fase en la que más falta le hace a los de Marcelino. Como si pretendiera igualar toda la suerte que tuvieron con las ausencias en el rival durante el primer tramo de la competición, el azar ha querido igualar esta circunstancia en el peor momento posible.
VALÈNCIA. La diosa fortuna ha decidido darle la espalda al Valencia CF en la fase en la que más falta le hace a los de Marcelino. Como si pretendiera igualar toda la suerte que tuvieron con las ausencias en el rival durante el primer tramo de la competición, el azar ha querido igualar esta circunstancia en el peor momento posible.
Las bajas de Murillo, Paulista y Guedes, unidas a la duda de que Garay y Kondogbia puedan estar mañana ante el FC Barcelona en el Camp Nou, conduce al Valencia CF a un panorama complicado en vísperas de la visita al Camp Nou en la ida de las semifinales de Copa del Rey.
Y el caso es que al principio de la temporada, los de Mestalla presenciaron los efectos de las ausencias en casi todos sus rivales al comienzo de la campaña. Hasta en seis de las primeras siete jornadas la tendencia era que el rival del Valencia CF perdía a su mejor futbolista, o uno de los más destacados a la hora de enfrentarse a los blanquinegros.
De este modo, y en la primera jornada, a pocas horas de enfrentarse al Valencia CF a la UD Las Palmas se les caía Kevin Prince Boateng. El futbolista no iba a ser traspasado este verano -de hecho renovó su contrato-, pero una petición personal del futbolista alemán al presidente Miguel Angel Ramírez aduciendo falta de adaptación de su pareja a la isla, acabó con el jugador fuera de la convocatoria y más tarde con su fichaje por el Eintracht de Frankfurt. El partido concluyó con el primer triunfo en la liga, 1-0.
En la jornada dos el Valencia acudía al Bernabeu. En la capital le recibió el equipo de Zidane sin Cristiano Ronaldo ni Ramos. El primero arrastrando la sanción de haber empujado al colegiado De Burgos Bengoechea en el partido de vuelta de la supercopa de España disputado en el Camp Nou. El resultado del empujón, cuatro partidos en lo que no pudo actuar en la liga; el del Valencia fue uno de ellos.
No fue la única ausencia para el Madrid ante el Valencia en aquella jornada. Sergio Ramos fue expulsado por González González en Riazor por un codazo ante el deportivista Borja Valle. Los de Marcelino empatarían a dos en el Bernabeu.
Nos vamos a la tercera jornada en la que el Valencia CF recibe en Mestalla al Atlético de Madrid. Y lo hace sabiendo que los de Simeone no van a poder contar con Antoine Griezmann quien fue expulsado en la primera jornada. El francés, según el acta, insultó a Martínez Munuera, razón por la cual el comité le sancionó con dos partidos. Mestalla fue el segundo de los partidos de suspensión del galo. El resultado final fue de 0-0.
En la cuarta jornada llegó el derbi, y en él el Levante no pudo contar con José Luis Morales. Todo por culpa de la expulsión sufrida en la segunda jornada ante el Deportivo. Tras ver la segunda amarilla, se quejó amargamente y Alberola Rojas lo recogió en el acta. Dos partidos fuera que propiciaron su ausencia en el derbi. El enfrentamiento acabó en tablas, 1-1.
Para la jornada cinco ante el Málaga, fue la única jornada que el rival no perdió a ninguno de sus miembros destacados. Aún así, su momento era tan flojo que se llevó una manita de Mestalla en la noche más feliz de Simone Zaza con hat-trick incluído.
Llegó la sexta jornada y los de Mestalla viajaban a Anoeta. Allí se encontraron con que los locales debieron cubrir un agujero en su defensa ya que una lesión impidió a Íñigo Martínez ser de la partida. El Valencia ganó el partido 2-3.
Y para la séptima jornada los de Marcelino recibieron al Ath. Bilbao. Los de Ziganda se presentaron en Valencia sin Iker Muniáin, quien se había lesionado previamente días atrás disputando un encuentro de Europa League ante el Zorya ucraniano. El Valencia también disputó el partido sin Kondogbiá y lo notó en la fase final. Al final victoria local por 3-2.
A todos estos encuentros hay que sumarle el punto de inflexión. Se sitúa en la jornada trece con la visita del Barcelona a Mestalla. El Valencia empató a uno ante un Barcelona en el que sin Mascherano por lesión, ni Piqué por sanción, Valverde tuvo que alinear a Vermaelen.
Pero al finalizar ese encuentro, el club comunica que Guedes pasará por quirófano para que se le implante un tornillo en el dedo del pie debido a una pequeña fisura. La semana anterior, el Valencia ya había perdido a Murillo, quien tuvo que pasar por el quirófano -aún no ha vuelto a las canchas-, por una hernia del deportista. Además, en el partido ante los azulgrana Garay se lesionó la musculatura del abdomen. Resultado, visita a Getafe y primera derrota de la temporada, 1-0.
En la jornada quince, visita del Celta y victoria por la mínima. La factura de ese encuentro fue altísima ya que forzó Carlos Soler para poder estar ante los vigueses debido ya al gran número de bajas. Volvió a la competición el sábado ante el Real Madrid...
En la jornada dieciséis partido en Ipurúa. Sin Murillo, Garay, Soler ni Guedes (aunque reapareció al final). Resultado, derrota ante el Eibar 2-1.
Se agravó todo en la jornada siguiente. Visita del Villarreal. Derrota 0-1 con la expulsión de Simone Zaza por un "cruce de cables" en la presión a la defensa amarilla.
Ante el Girona, victoria 2-1 pese a las bajas e idéntico resultado en Riazor. Y la debacle comenzó a gestarse en la jornada 20. En la primera de la segunda vuelta. El Valencia visitaba Las Palmas con las bajas "controladas" de Gayà y Parejo tras forzar la quinta amonestación ante los gallegos siete días atrás...
Pero Munuera Montero estuvo igual de desastroso que el Valencia que no supo rematar en 45 minutos al peor equipo de la primera división. Primero, la autoexpulsión de Gabriel en una absurda reiterada protesta tras señalar el colegiado un penalti a favor de los locales. Más tarde, otra doble amarilla para Rubén Vezo que dejaría al Valencia con nueve hombres, una derrota 2-1 ante Las Palmas y sin centrales. Justo el partido antes de recibir al Real Madrid...
Para rematar la faena, Gabriel Paulista se lesionó en Copa ante el Alavés. Parecía rotura de ligamentos, pero al final del mal fue el menos. Todo se quedó en un "leve esguince de rodilla". Dos semanitas no se las quita nadie. Sólo con Garay y con Coquelin de central improvisado, no hace falta recordar como acabó el partido ante el Madrid. Y la guinda a este pastel de la mala fortuna, fue en este último partido. Marcelino tuvo que quitar a Guedes por una lesión muscular que le impedirá estar en el Camp Nou, mientras destacaba su sustituto Carlos Soler en la vuelta a los terrenos de juego.
Todo se ha conjurado en contra precisamente en vísperas del partido más importante del año. Toca hacer frente a la adversidad. Posiblemente a Marcelino y a los suyos les ronde por la cabeza el viejo dicho de "Quién dijo miedo habiendo hispitales!".