ALICANTE. Primero fue Ciudadanos y ahora es Compromís el partido que pone sobre la mesa el asunto del lamentable estado del estadio Rico Pérez de Alicante.
El tema tiene miga porque se trata de una instalación de titularidad pública, es propiedad del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) o lo que es lo mismo de la Generalitat, en la que precisamente gobierna Compromís en coalición con el PSPV-PSOE.
El caso es que este viernes el candidato a la alcaldía de Alicante por la formación nacionalista, Rafa Mas, anunciaba el registro de una batería de iniciativas relacionadas con el mantenimiento y conservación del Rico Pérez, otrora emblema de la ciudad y hoy símbolo de la indiferencia con la que los políticos de todos los signos la han tratado en las últimas décadas cuando han tenido responsabilidades de gobierno sobre ella.
El edil de Compromís recordaba que "es un recinto público" y que "se encuentra en un estado ruinoso; es peligroso e insalubre para los aficionados del Hércules y las personas que vienen de fuera a ver a su equipo cuando juega contra el blanquiazul".