VALÈNCIA. El ciclista esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) ganó este sábado la 20ª y penúltima etapa del Giro de Italia, disputada entre Tarvisio y Monte Lussari sobre 18,6 kilómetros de una dura cronoescalada que le sirvió, además, para dejar sentenciado el triunfo en la clasificación general.
Jaleado por cientos de compatriotas, al estar cerca la frontera con Eslovenia, Roglic realizó una tremenda actuación sobreponiéndose a un problema técnico. Con un tiempo de 44:23 en la meta final, el líder del equipo Jumbo-Visma se enfundó el maillot de líder y conquistó su primer título de la llamada 'corsa rosa'.
La 106ª edición del Giro, por tanto, vivirá este domingo su intrascendente último día por las calles de Roma con el paseo triunfal de Roglic, quien rompió a llorar al confirmar su victoria de etapa en Lussari. Le recuperó al británico Geraint Thomas (INEOS Grenadiers) 26 segundos de desventaja, con problema incluido en su bicicleta.
Mediado el recorrido de su jornada contrarreloj, un bache en la carretera provocó un salto de cadena. Eso hizo que el esloveno tuviera que cambiar de bici a instancias del coche de equipo, cuando ya le había recuperado la distancia a un Thomas que, pese a todo, se desinfló en el tramo final de su carrera y finalizó a 40 segundos del ganador.
Esa circunstancia privó al corredor británico de llevarse la 'maglia rosa', pero al menos le valió para adjudicarse el segundo lugar en Lussari y también del podio en la clasificación general. Acompañando a ambos en esta 20ª etapa, el portugués João Almeida (UAE Team Emirates) cruzó la meta a 42 segundos del liderato.
El perfil de esta etapa sabatina, con arranque a 750 metros sobre el mar y llegada a 1.744 metros, dispuso unas durísimas rampas hacia la cumbre del Monte Lussari. A tenor de 7,8 kilómetros al 11,2 % de desnivel medio, con instantes incluso por encima del 15 %, los gallitos del pelotón exhibieron nuevamente su poderío.
De cara a la 21ª y última etapa, con salida y llegada en Roma, el Jumbo-Visma brindará por la victoria de Roglic durante una jornada plenamente llana sobre 135 kilómetros. Los principales atractivos turísticos de la capital italiana, como por ejemplo el Coliseo, el Foro Romano y la orilla río Tíber, bajará el telón a este Giro con acento esloveno.