Una victoria por Calpe y por huir de la autocomplacencia

VALÈNCIA. Ipurúa esconde muchos retos para el Levante. Huir de la autocomplacencia y de las imágenes de confirmismo es el primero y más esencial después del mal regreso a la competición el viernes pasado ante el Huesca. Paco López borra de su diccionario la expresión 'falta de intensidad', pero lo cierto es que no regatea el hecho de que los granotas firmaron una pésima actuación la pasada jornada que hay que hacer olvidar frente al Eibar. El caso es que, junto a la meta emocional de dedicar al triunfo a Antonio Calpe, la leyenda que se fue para siempre este pasado miércoles, el otro gran objetivo es sobrepasar cuanto antes la barrera de los 42 puntos que otorgan la permanencia de manera virtual. 

La obsesión del cuerpo técnico no es otra: salvarse ya. Después, ya se verá. Y una victoria en casa del peor local del campeonato significaría ponerse con 38 puntos en la tabla y volver a atosigar los puestos posteuropeos. Europa ya no es una ilusión, queda demasiado lejos, pero revolver la zona de los aspirantes sí puede ser un aliciente de interés. El otro, regresar a la senda de la victoria después de dos partidos consecutivos con derrota, algo que al Levante solo le ha pasado una vez en esta Liga: cuando, a inicios de campaña, encadenó tres choques perdidos de manera consecutiva antes de enlazar cinco empates a uno. 

El cúmulo de retos llega con un alta muy esperada en las filas granotas, la de Melero. El madrileño tenía complicado estar en Ipurúa a principios de semana pero ha completado sesiones y ha podido meter cabeza en la expedición. No será titular, pero sí es una gran noticia de cara a la recta final de la competición. Sobre todo teniendo en cuenta la plaga de lesiones que se vive en Buñol, camino de ser el peor balance final de ausencias musculares desde que Paco López es entrenador levantinista. Campaña, el eterno caso Vukcevic y Miramón son las bajas que tienen los granota para esta tarde. Y el lateral es, precisamente, el que mueve todos los planes. 

La elección del técnico sobre su carril diestro moverá el resto de la alineación. Una línea de cuatro tendrá a Son como inquilino, mientras que una de cinco también puede incluir a Coke. Es lo que el de Silla admitió en sala de prensa: o Son o Coke. Son las alternativas para suplir la baja del lateral aragonés. Mientras, el centro del campo se mueve en función de esa raya trasera, pero todo apunta al regreso del doble pivote, con Radoja y Malsa en sala de máquinas. Esas son las novedades que esconce la alineación granota que, en lo que se refiere al resto de la plantilla, volverá a tener como piezas angulares a las teóricas primeras espadas. 

El peor local ¿reto o contratiempo?

Las urgencias de los rivales es lo que, ahora mismo, pone al Levante en pie de guerra. Si bien es cierto que en Orriols no hay alarmas, de momento, el vestuario sigue jugándose mucho, sobre todo de cara a la temporada próxima. La planificación con economía de guerra ya funciona y el club necesita ingresar por 16,5 kilos este junio. Hay futbolistas con los focos sobre el cogote y, a efectos económicos, no es lo mismo ser 14º que 8º.  

Mientras, a Mendilíbar no le importa en qué posición concluya su Eibar la temporada siempre y cuando sea por delante de los tres de la cola. La urgencia en casa armera es máxima, el equipo es penúltimo con 23 puntos y, además, no gana desde el 3 de enero. Ese día, ante el Granada, se fraguó la primera y hasta el momento única victoria local del Eibar este curso. Son 7 derrotas ante sus butacas y el Levante tiene que aprovechar la coyuntura. 

Eso sí, la tensión por la situación clasificatoria sí dio alas al rival granota hace una semana, por lo que ahora el cuento va de impedir que las revoluciones contrincantes sean mayores solo porque la zona roja les aprieta mucho más en el cuello. Por si fuera poco para los vascos, Bryan Gil, su sensación esta campaña, no podrá estar tras lesionarse ante el Real Madrid -el último envite, con derrota, de los hombres de Mendilíbar-, pero tampoco serán de la partida Pedro Bigas, Róber Correa, Edu Expósito, Recio ni Muto. 

Alineaciones probables:

Eibar: Dmitrovic; Pozo, Oliveira, Arbilla, Cote; Sergio Álvarez, Diop, Aleix García, Inui; Kevin Rodrigues y Kike García.

Levante: Aitor; Coke, Posti, Duarte, Clerc; Radoja, Bardhi, Morales, De Frutos; Dani Gómez y Roger

Árbitro: Estrada Fernández / González Fuertes (VAR)

Estadio: Ipurúa.