Valencia Basket se llevó un emocionante encuentro en Sant Adrià ante un equipo luchador que nunca se dio por vencido. Las taronja tuvieron que sudar para sumar su tercera victoria, pero demostraron su capacidad para competir en un partido siempre igualado que no se decidió hasta el final
VALÈNCIA. Valencia Basket se llevó un emocionante encuentro en Sant Adrià ante un equipo luchador que nunca se dio por vencido. Las taronja tuvieron que sudar para sumar su tercera victoria, pero demostraron su capacidad para competir en un partido siempre igualado que no se decidió hasta el final.
El partido comenzó equilibrado, exhibiendo las buenas sensaciones con las que llegaban los dos equipos. El gran nivel defensivo propició los primeros errores en ataque. El partido apuntaba a una anotación baja, y las buenas acciones de Pina y Adams dieron a Valencia Basket una mínima diferencia, que llegó a cuatro puntos con un triple de Bettencourt en el inicio del segundo parcial.
Pero Snatt’s reaccionaría. Una zona muy bien trabajada complicó la vida al ataque taronja, que solo respondía desde el perímetro. Los rebotes de Coulibaly y Jespersen y la aparición de Simmons le dieron la vuelta al marcador. La americana, con gran acierto y multiplicándose en ataque, guió a las de Gloria Estopà para marcharse con 4 puntos de ventaja al descanso (32-28).
La reanudación tampoco traía buenas noticias para Valencia Basket, que veía como Ayuso ponía a las suyas 7 arriba. Además, Simmons, que acabaría con 25 puntos, se entonaba y hacía daño, permitiendo que las locales mantuvieran la diferencia. Pero cuando más se complicaba el encuentro, apareció Joy Adams. La americana respondió a cada canasta de su rival, dejando un bonito duelo con Simmons para el recuerdo y a Valencia Basket por encima en el marcador tras el tercer cuarto, siendo la última canasta un nuevo triple de Bettencourt (49-52).
En el último con todo por decidir, Valencia Basket se sobrepuso al rebote ofensivo de Sant Adrià, a Simmons y a las faltas, con la experiencia de María Pina primero y Meiya Tirera después. La jugadora de Malí, clave en los últimos minutos, sigue creciendo y manteniendo sus números. A pesar de todo, tuvo oportunidad Sant Adrià, que tras un tiro libre de Anna Gómez que ponía el 64-67, lo intentó por medio de Simmons para forzar la prórroga, sin suerte.
Trabajado triunfo de un Valencia Basket, que tras vencer holgadamente en la Fonteta, demuestra que también sabe sufrir para lograr la victoria en una pista complicada, y suma ya tres consecutivas.