VALÈNCIA. El Valencia ha sufrido estos días, en el arranque de las vacaciones del primer equipo, el brote de covid-19 más grande la temporada con al menos cuatro positivos entre sus integrantes diagnosticados en las jornadas posteriores a la conclusión de la competición el pasado sábado.
El primero afectado fue el internacional sub-21 portugués Thierry Correia, al que se le detectó en el control al que le sometió la federación lusa antes de incorporarse a la concentración para la fase final del europeo de la categoría, que se perderá por el contagio.
Su positivo puso en alerta al Valencia que transmitió la noticia a sus compañeros y pidió a aquellos que aún estaban en la ciudad que se sometieran a una PCR en la ciudad deportiva de Paterna y a los que ya se habían ido que lo hicieran allá donde estuvieran.
El club no ha informado del resultado de esas pruebas pero sí que lo han hecho diversas federaciones que habían convocado a jugadores del Valencia.
En el caso de Maxi Gómez fue el propio delantero uruguayo quien anunció en las redes sociales que había dado positivo antes de emprender el vuelo a su país. Tras la suya llegaron las confirmaciones de la federación portuguesa por Gonçalo Guedes y de la de Países Bajos por Jasper Cillessen.
Todos ellos deberán guardar ahora una cuarentena y someterse a nuevas pruebas antes de retomar su trabaja con sus selecciones o la actividad social de sus vacaciones.