El Tenerife ha superado cuatro de las cinco promociones de ascenso o permanencia que ha disputado durante su historia
VALENCIA. El Tenerife ha superado cuatro de las cinco promociones de ascenso o permanencia que ha disputado durante su historia, todas ellas con el equipo insular jugando el partido final lejos del Heliodoro Rodríguez López.
La entidad tinerfeñista, desde que compite en categoría nacional, ha logrado todos sus ascensos en años impares (1961, 1971, 1983, 1987, 1989, 2001, 2009 y 2013), de los que cuatro fueron a Segunda División y otros cuatro a Primera División.
El equipo que en la actualidad preside Miguel Concepción ha disputado cinco promociones, de las que cuatro terminaron con triunfo isleño (1973, 1989, 1990 y 2013) y una con derrota, ante la Ponferradina (2012), que fue la única que tuvo su partido decisivo en la isla.
La primera promoción que disputó el Tenerife desde su ingreso en el fútbol profesional fue de permanencia en Segunda División, en la temporada 1972-1973 ante el CD Ensidesa.
El equipo canario sentenció la eliminatoria en el encuentro de ida en el Heliodoro Rodríguez López (6-2) y en la vuelta le valió con empatar en Asturias (0-0) para certificar la permanencia.
La segunda fue de ascenso a Primera División, en la campaña 1988-1989 con Benito Joanet en el banquillo insular.
Los tinerfeños vencieron en la ida al Real Betis (4-0), equipo que había militado esa temporada en la máxima categoría, y consiguieron su segundo ascenso a Primera División en su historia, pese a caer derrotados en Sevilla (1-0) en el segundo encuentro de la eliminatoria.
La temporada siguiente, el Tenerife tuvo que disputar la promoción de permanencia en Primera División ante el Deportivo de La Coruña.
En el encuentro de ida, canarios y gallegos empataron a cero, mientras que en la vuelta disputada en A Coruña los tinerfeños vencieron por la mínima (0-1) y lograron mantener la categoría.
La única permanencia que terminó con resultado negativo para los canarios fue la temporada 2011-2012, cuando el Tenerife debía superar tres eliminatorias para lograr el ascenso a Segunda División.
El equipo que entrenaba Quique Medina venció al Linense y al Badalona y fue eliminado por la Ponferradina en la última y definitiva eliminatoria, tras perder los dos encuentros del cruce.
En la campaña siguiente, con el actual técnico del Cádiz, Álvaro Cervera, en el banquillo insular, el Tenerife superó al Hospitalet y firmó el ascenso a la División de Plata, en un partido decisivo que se disputó en territorio catalán.