VALÈNCIA. El centrocampista de la Roma, Gonzalo Villar, ha hablado de cómo se fraguó su traspaso al conjunto italiano procedente del Elche y sin que el Valencia ejerciera su derecho de tanteo este pasado mercado de invierno. El murciano lo ha hecho en el canal de You Tube del periodista Miguel Quintana, en el que, entre otros asuntos, ha hablado largo y tendido de las razones por las que terminó vistiendo los colores romanos en enero. Un traspaso que contó este diario en todas sus etapas.
"¿Los motivos por los que decido ir a Roma y no a Valencia? Punto número uno: para los jugadores es súper importante que te llame el entrenador. Me llamó Paulo Fonseca y estuvo hablando conmigo un buen rato. Me explicó desde cuándo me conocía, por qué se había interesado...", dice Villar. Es, para él, el primer apartado de su lista de razones por las que prefirió Italia a Valencia.
Sin embargo, el motivo más importante radica en la diferencia de deseo por parte de los clubes: "Hasta que no aparece la Roma, el Valencia no me dice nada, y yo al fin y al cabo ya estaba haciendo ruido. Pero hasta que no aparece la Roma el Valencia no termina de decirme que me quiere. Es como: "ahora que te van a llevar... sí te quiero". Es otra de las razones", advierte.
El jugador también hace hincapié en las cantidades: "La Roma, por un jugador de Segunda División, pagó 5 kilos. Ellos ni se pensaban pagarlos y el Valencia necesitó tiempo para saber si ejecutaba mi opción, que era de un millón, del 20%", recuerda. "La Roma empezó ofreciendo 3 millones y luego dobló casi sin problema, y el Valencia no...". Eso sí, él admite que no lo tuvo tan claro: "Tuve dudas porque es el Valencia, está al lado de casa, lo tengo todo... Pero claro, si un club va a por ti y el otro tiene que pensarse si paga el 20%... El Valencia me quiso, pero esos pequeños detalles -o no tan pequeños para mí- me hicieron acabar en la Roma".
Aún así, Gonzalo Villar subraya en el vídeo -de hecho, es lo primero en lo que incide al hablar de su traspaso- que "no hay ni un euro de diferencia en lo económico". Es decir, el Valencia tenía que igualar la oferta que los italianos presentaron en el Martínez Valero, por lo que Villar "no iba a recibir ni un euro más en un sitio u otro, si en Roma pagaban 100, en Valencia 100 también", ejemplifica.
Villar también cuenta cómo fueron sus últimos días de franjiverde, mientras la Roma apostaba fuerte por él y esperaba al Valencia para igualar la oferta. "El mes de enero fue un culebrón. Estaba desayunando con el Elche ese domingo por la mañana, antes del partido contra el Alcorcón, y ya me dijeron en el móvil que se habían puesto de acuerdo. Yo igualmente quería jugar, estaba disfrutando como un enano en el Elche", relata.
Eso sí, también recuerda cómo tuvo que pedir el cambio en aquel encuentro ante el riesgo de lesión antes de consumarse el fichaje: "Me tuve que salir en el minuto 50 o así por molestias en la rodilla. Ahí ya pensé que no me la podía jugar". A los días de aquello, llegó el acuerdo definitivo mientras él y su agente seguían esperando a César Sánchez.
"La idea principal de la Roma era ficharme y dejarme cedido hasta junio", confiesa. "Yo eso lo veía fenomenal, pero luego Fonseca vio muchos partidos míos y decidieron que querían ficharme para ya", apunta Villar como otra de las evidencias de la apuesta firme romana ante las dudas de los valencianistas. Y es que el club de Mestalla tenía planes con él, pero para verano.
Gonzalo Villar también ha hablado de uno de sus ídolos, uno de los espejos donde se mira a nivel futbolístico y el tipo de jugador en el que pretende convertirse en un futuro. No es otro que Dani Parejo: "Prefiero sentir que el equipo es mío, esta en contacto de la pelota, que firmar la jugada del partido. Realmente es lo que hace Parejo en el Valencia. Si Parejo está mal, el Valencia está mal".
Eso sí, no solo el trato de balón del de Coslada es lo que maravilla al '14' de la Roma. La personalidad del capitán es otra de las virtudes que quiere emular: "Yo he vivido estando en el Valencia todo lo que le ha caído encima, y el tío ha tirado un penalti en el minuto 90 después de haber tenido diez pérdidas... Y engañando al portero. Eso es tener una personalidad aplastante. El fútbol ha sido injusto con él porque se le está reconociendo más casi a final de su carrera que antes, y me parece un poco injusto. Así es el fútbol...".
Cabe recordar que la posición a reforzar con la posibilidad de reclutar a Villar en la pasada ventana de mercado era la del mediocentro puro, el recambio, precisamente, de Dani Parejo en sala de máquinas. No son pocos los técnicos que han pasado por Mestalla y que han adolecido la falta de un futbolista de caracterísitcas similares para descargar de partidos a su piedra angular, o incluso para sufrir menos sus bajas -casi siempre en forma de sanción y no de lesión-. Marcelino ya tocó ese tema en su reciente etapa en el Valencia y Celades ha recalcado varias veces la "pena" de no tener un jugador de características similares a las del capitán.