VALÈNCIA. Gonzalo Melero vive su mejor momento de la temporada. No solo por la confianza que el madrileño muestra sobre el césped en una versión mejorada de sí mismo respecto a una primera vuelta alejado de su nivel, sino por el regreso a su cita con el gol. Y es que el '22' granota, que el curso pasado fue de los más goleadores de Paco López, marcó ante el Elche su tercer gol de la campaña. Si en la 20/21 anotó ocho entre Liga y Copa -además muchos de ellos de vital importancia, como el de las semifinales coperas-, en la actual le está costando más... de momento. Y es que para Melero todavía queda campeonato para revitalizar su cuenta: "De momento, de momento... No está siendo mi temporada en esa faceta... de momento. Pero hay tiempo", dijo literalmente en 'El Matx' de Plaza Radio tras el partido del pasado viernes.
Eso sí, aunque el ex del Huesca no esté engordando sus cifras en este epígrafe, sí es cierto que lleva dos tantos en tres partidos. Justo cuando el equipo ha dado, por fin, un paso adelante y la confianza parecer haberse asentado entre los hombres de Alessio Lisci. En cualquier caso, a estas alturas el año pasado Melero acumulaba cinco goles en su haber. Hoy son tres y con 12 jornadas por disputar. La campaña pasada anotó tres en el último tercio de Liga. Efectivamente, Melero tiene tiempo de ver puerta con más asiduidad así como de regresar a un rol box to box que también tiene oportunidad de testar en el actual Levante. Para el madrileño, que se queda con la semana más allá del partido del Elche, "se vio otro equipo, que se soltó" y un vestuario "mucho más seguro a raíz de la victoria en el Metropolitano": "Hacer 7 puntos de 9 es complicado y haberlo conseguido nos da mucha moral", dijo Melero acerca de lo complicado que sigue siendo conseguir la hazaña de evitar el descenso.
Además, salir y marcar también aumenta la confianza particular del propio futbolista, que esta temporada se perdió una fase importante por una nueva lesión de isquios, la misma que padeció la temporada pasada y que le hizo perderse un período todavía más decisivo del curso. "Encadené varias lesiones que no me dejaron volver durante dos meses y medio, y hasta esta última tanda de partidos llevaba casi cuatro meses sin jugar dos partidos seguidos... No es fácil entrar ratitos y hacerlo bien", reconoció. El viernes jugó 26 minutos, pero ante Betis, Atlético y Celta fue titular.
Además, Melero también opinó sobre la llegada de Felipe Miñambres a la dirección deportiva del club. Alessio Lisci dijo en sala de prensa que, posiblemente, sí existe el 'efecto Miñambres' en Orriols y el centrocampista mantuvo ese discurso. El leonés es una figura que faltaba en el Ciutat y que acostumbra a tener un trato personal con la plantilla. Tanto es así que incluso en descansos, como el día del Betis, baja al vestuario. Contra el Elche a Melero le pilló el intermedio calentando, pero reconoció el trato directo del ejecutivo en el día a día de la misma forma que, minutos antes, lo había hecho el entrenador: "Es verdad que habla mucho con nosotros y nos da su opinión. Al final, se habrá visto 200.000 partidos y hay que tenerlo en cuenta", aseguró.
Y de los despachos, al césped. Habló Melero de uno de sus compañeros, sensación absoluta este curso y, seguramente, la pieza más en forma en el elenco de Alessio Lisci: Pepelu. "Todo el mundo sabía de su potencial y a mí me gusta mucho lo que aporta sin balón, con balón... y en el vestuario", apuntó. Para el mediocentro, Pepelu "merece ser una pieza clave", aunque a veces "compartir posición nos haga no poder jugar los dos": "Me alegro por él, le tengo mucha estima", repasó.