VALÈNCIA. Cada jornada que pasa la lista de ausentes de Paco López araña una pieza más. Sergio Postigo es la baja que se cobra la enfermería del Levante para el choque ante el Huesca y, por tanto, el técnico tendrá que remendar esta vez también el centro de la zaga. Con Duarte aislado en su domicilio por positivo en Covid-19, el preparador valenciano solo puede echar mano de un hombre para acompañar a Vezo: Róber Pier. En el banquillo, como alternativa para el eje, queda el central del Atlético Levante UD Alfredo Pedraza.
En los laterales, se prevé la continuidad de Miramón, aunque el flanco derecho sigue siendo una de las posiciones que más debate generan en el levantinismo, con Son y Coke como claras alternativas. En la izquierda, sin Toño, volverá a ser Clerc el dueño.
El centro del campo, sin Bardhi ni Campaña, presenta paradójicamente muchas alternativas. Paco López, con dos de sus puntales y teóricas primeras espadas en el dique seco, se ha encontrado con la aportación de otras piezas que hace que su equipo incluso pueda gozar de fondo de armario y de margen para el movimiento de futbolistas en medular. Podría descansar Malsa, quien volvió a jugarlo todo ante la Real Sociedad, y el Levante podría repetir el dibujo con el que consiguió maniatar al Getafe hace tres semanas: Vukcevic con Melero, y los costados para Rochina y Jorge De Frutos.
En punta de lanza, Morales podría entrar para sentar a un Dani Gómez que encadena tres encuentros partiendo de titular y que, aún así, se ha hecho un sitio de relevancia en los planes granotas. Junto al Comandante, Roger será con total seguridad el hombre referencia. Con ello, el Levante podría presentar un once con Aitor, Miramón, Róber, Vezo, Clerc, Vukcevic, Melero, Rochina, De Frutos, Morales y Roger.