VALÈNCIA. El ejecutivo mallorquín Mateu Alemany, director general del Valencia, reconoció un antes y un después de las dos últimas visitas a Singapur. Tras los dos encuentros con el propietario Peter Lim, Mateu y Marcelino tienen claro que su ámbito de poder ha disminuido en las decisiones de calado del club en cuanto a entradas y salidas de jugadores.
DESTITUCIÓN.- "No tengo constancia de si Murthy dijo que yo no continuaba. Por esos cambios de formato en la toma de decisiones, si tuviese dudas, y en algún momento las he podido tener por eso hemos ido a Singapur, si yo considerase que el propietario o la afición no confiase en mí me marcharía a Palma de Mallorca. Estoy muy contento en Valencia.
INDEMNIZAR AL CLUB.- "Esto no tiene que ver con situaciones contractuales si un director general no quiere continuar se busca un acuerdo, no somos futbolistas".
DIMISIÓN.- "Después de las variaciones en la toma de decisiones interna del club en algún momento ha habido alguna duda respecto a la confianza del máximo accionista en nuestra gestión y resuelta esa situación, salvada, puesto que el propietario en las dos reuniones que mantuvimos manifestó que su nivel de confianza era absoluto en nuestro trabajo y, contando además con el cariño de la gente, no tengo ningún elemento para plantearme mi salida".
MÁS PODER PARA LIM.- "Hay un cambio entre los dos primeros años y esto no es un cambio del modelo que se basa en el consenso con la decisión final del propietario, que ha hecho un esfuerzo histórico en el fútbol español dentro de la historia de las SA deportivas. Es cierto que el propietario ha decidido involucrarse más y quizás se ha ralentizado alguna situación y ha habido un problema de comunicación por la distancias... Tenemos que ajustar los procesos, la comunicación, las argumentaciones, desde el momento en el que el propietario se quiere involucrar más que en otras temporadas".
NUEVO ROL.- "Es evidente que en la cadena de poder y de decisión de un club profesional hay muchas decisiones. En buena lógica, hay algunas situaciones ordinarias de entradas y salidas de jugadores que son propias de cuerpo técnico y dirección general y hay otras, que son estratégicas y económicas, de un nivel que trasciende lo deportivo y entiendo que las tome el máximo accionista".
"El propietario se involucra más en la toma de decisiones, dentro de un mismo modelo, pero en todas las operaciones del verano yo les he dado ejecución a la decisión que se ha tomado arriba. No tiene porqué dar explicaciones de porque se involucra más. Lo importante es que las valoraciones se hacen con la plantilla cerrada. Hoy estamos contentos y creo que los aficionados están contentos pero el día 2 de septiembre haremos cuentas".
"La situación del Valencia recae sobre las obligaciones y las inversiones que ha hecho el propietario del club. Las operaciones de 60 o 70 millones de euros, en buena lógica, deben recaer en la opinión del propietario. Yo si no me sintiese útil estaría en Palma de Mallorca".
"Periodísticamente todo esto puede ser divertido pero no se corresponde a la realidad. Siguen los procesos que nos llevaron al éxito pero con la variación de que el propietario se involucra más".
RENOVACIÓN DE MARCELINO.- "La propiedad nos ha trasladado el grado de confianza en el trabajo del míster y en el mío. No se ha planteado su renovación porque ha sido un verano complicado pero es una situación planteable. A mí me encantaría que siguiera".