VALÈNCIA. Vida nueva. Santi Mina ha decidido darle un vuelco importante a su trayectoria tras conocer que Marcelino pretende reforzar la delantera y que lo ha puesto en el mercado. El futbolista gallego está dispuesto a abandonar Mestalla y contempla regresar a Vigo para jugar en el equipo de su tierra. ¿Morriña? Algo de cierto componente de nostalgia existe en este caso pero hay otros factores que explican la sorprendente decisión del atacante de 23 años que ha resuelto abandonar el Valencia tras cuatro temporadas que mezclan luces y sombras, aunque con un rendimiento mejor y más estable en los dos últimos cursos.
En la decisión de Mina pesan otros motivos. La ofensiva que ha recibido el jugador por parte del Celta desde que la operación despertó el viernes pasado ha sido total. Por tierra, mar y aire, Santi Mina ha sido bombardeado a llamadas para regresar a Vigo, aprovechando el interés de Marcelino en el tanque uruguayo Maxi Gómez.
El primero en llamarle el fin de semana fue Iago Aspas. El delantero de Moaña habló con el valencianista para trasladarle que el Celta quiere recuperar prestigio en LaLiga con jugadores de la tierra, formados en las categorías inferiores celestes. "Es una decisión que tiene que tomar el club. A mí me gustaría que volviese, pero como me gustaría que volviesen Denis, Rafinha y Joselu. Espero que vuelva, sobre todo si llega a un acuerdo. Esperamos cerrarlo pronto", reconoció Aspas este miércoles a la televisión autonómica gallega desde la concentración de la selección española.
El jugador más representativo del Celta no fue el único en ponerse en contacto con Mina, el capitán Hugo Mallo también lo ha hecho, al igual que otros componentes de la plantilla celtiña como Rubén Blanco o David Costas. Según publicó ayer el Faro de Vigo, a Carlos Mouriño, presidente del Celta, le gustaría volver a reunir en la primera plantilla de Balaídos a Santi Mina, Rubén Blanco y David Costas, tres de sus mejores canteranos. Ellos alcanzaron el subcampeonato de España juvenil en 2014 y juntos fueron internacionales sub 19 y sub 21. Todos han hablado con Mina. La familia del jugador, con la que también ha comunicado el Celta, está de acuerdo en la vuelta a casa del punta del Valencia. El elemento sentimental juega a favor de la salida de atacante.
Utilizando el mismo modus operandi que Marcelino, Fran Escribá, técnico del Celta, se ha puesto en contacto con Santi Mina y le ha explicado que va a ser un jugador importante en el Celta del futuro si finalmente la operación se cierra. En el cuerpo técnico celeste existe optimismo respecto a que Mina retorne a Balaídos. Escribá cuenta con Mina para el ataque de su nueva plantilla, de acuerdo con Felipe Miñambres, director deportivo celeste. Mina entiende que, aunque en un equipo menor y con otros objetivos, en el Celta va a tener el rol de futbolista importante y más minutos de juego.
MENDES, SORPRENDIDO.- La decisión de Santi Mina de regresar a Balaídos y a su tierra con apenas 23 años, después de haber estado cuatro temporadas en el Valencia ha descolocado, incluso, a Jorge Mendes, el agente que lo llevó al Valencia, y que maneja ofertas mejores económicamente para el delantero. Mendes visitó Valencia en el mercado de invierno y le comunicó a Anil Murthy y Mateu Alemany que contaba con una oferta por Santi Mina de alrededor de 40 millones de euros, entre fijo y bonus, que se podía hacer ya efectiva entonces pero que, en caso negativo, se mantendría para el periodo de fichajes estival. El Valencia, en una crisis total de puntería y con Santi Mina como único bombardero en racha, descartó la salida del gallego en aquel momento pero aceptó negociar la venta en verano porque la necesitaba para cuadrar sus números. Si Mina no cambia de idea y cuajan las negociaciones entre Valencia y Celta en la operación por Maxi Gómez, aquella oferta no aparecerá.
NO HAY ACUERDO CON EL CELTA.- Con Maxi Gómez y Santi Mina dispuestos a cambiar de camiseta, Celta y Valencia no se ponen de acuerdo. El traspaso está bloqueado. El Celta insiste en pedir dinero más Santi Mina para aceptar el acuerdo, mientras que el Valencia no acepta pagar por el punta uruguayo si, además, tiene que incluir al gallego en el acuerdo. La cantidad que pide el Celta baja conforme pasan las horas y en Galicia ya se apunta a que estaría entre los 10 y los 15 millones a parte de Mina. Mateu Alemany persigue un cambio de cromos y considera caro al uruguayo.
Negociar dos operaciones independientes también es complicado. El Celta tasa a Maxi Gómez, que tiene una cláusula de rescisión de 50 millones, en 40 kilos. Y el Valencia valora a Mina en una cantidad superior a los 20 millones para empezar a negociar. El Celta insiste en que ha recibido una oferta de 30 millones del West Ham United. Desde Inglaterra se apunta, además, a que Pochettino se habría fijado en Maxi para sustituir a Fernando Llorente. El verano va a ser largo.