La explicación a la petición de más centímetros en el costado derecho responde, fundamentalmente, a la necesidad de neutralizar los centros laterales del rival. La prioridad es que el lateral defienda bien y que tenga capacidad de salto para defender los envíos desde el costado contrario
VALÈNCIA. Uno de los secretos mejor guardados del Valencia respecto a los fichajes que tiene previsto realizar en el mercado estival es el del lateral derecho. La identidad del refuerzo no ha trascendido aunque, según ha podido conocer Plazadeportiva.com, a través de diferentes agentes que trabajan con el club o han preguntado qué características está buscando el Valencia en la lonja de jugadores, el perfil demandado es uno diferente al del resto de laterales que actualmente están en nómina.
Marcelino quiere un lateral derecho de más envergadura que los que tiene en plantilla. Un defensor alto que supere en estatura el metro ochenta. El entrenador está empeñado en fichar un 2 titular que supere el nivel futbolístico de Martín Montoya pero también su altura. El técnico asturiano quiere juntar más metros en las ABP o acciones a balón parado. Las ABP del contrario hicieron daño la campaña pasada tanto en centro frontales como en envíos laterales y el entrenador quiere resolverlo comprando más envergadura para su defensa.
El peaje a pagar en esta incorporación estriba en que un lateral grande puede tener, por contra, problemas con los atacantes pequeños y dinámicos, de ahí la dificultad de encontrar en el mercado un defensor alto y lo bastante coordinado como para no sufrir con los rivales menudos y habilidosos. El lateral tiene que ser, además, rápido para sorprender rompiendo líneas, como lo hace Martín Montoya, y para incorporarse al ataque aunque la prioridad es que defienda bien y que tenga capacidad de salto para defender los centros desde el costado contrario.
Lo que más preocupa es cerrar los centros laterales. La explicación a la petición de más centímetros en el costado derecho responde, fundamentalmente, a neutralizar los centros laterales del rival. Cuando un rival entra por un costado y centra, toda la defensa bascula hacía el lado donde se produce el centro para tratar de controlarlo. Los centrales se desplazan en horizontal hacía una banda y el lateral del otro costado, en un porcentaje muy alto, es el que salta con el delantero centro rival en la disputa. Ahí le duele a Marcelino.
Hay una estadística que maneja el cuerpo técnico del Valencia que indica que en un porcentaje muy alto de las ocasiones los goles llegan a balón parado o de centros laterales a la espalda de los laterales. Esa es la preocupación de Marcelino, porque esas jugadas ya le costaron goles al Valencia de Ayestarán, Prandelli y Voro hace dos temporadas, y también castigaron al suyo durante el curso pasado. Un punto débil de la defensa actual está en la espalda de Montoya tras los centros desde el costado contrario y en las disputas del lateral catalán en los balones aéreos ya que las suele perder.
Marcelino tenía hasta hace unos días en plantilla a un jugador que reúne esas características que está buscando. Era Nacho Vidal, que se va camino del Córdoba. Pero, tras verlo en juego la temporada pasada, el técnico lo consideró totalmente prescindible.
MISMO PROBLEMA EN LA IZQUIERDA
El técnico ha detectado el mismo problema en el perfil zurdo aunque Gayà cierra mejor su parcela y, por el momento, no se plantea cambios en ese costado aunque Toni Lato se juega su credibilidad esta temporada. Si Lato no convence, entonces el técnico planteará un relevo más alto que compita con el de Pedreguer.
Los laterales sondeados y los que el Valencia todavía tiene en cartera tienen, curiosamente, ese perfil. La mayoría supera el metro ochenta de estatura. Thomas Meunier mide 1'90 metros, Timothy Evans Fosu-Mensah, 1'83 metros; Matteo Darmian, 1'83 metros; Paulo Díaz, 1'84; Diogo Dalot, 1'83, Kevin Malcuit, 1'78, y Ricardo Pererira, 1'75.
Dalot ha fichado por el Manchester United y Ricardo Pereira por el Leicester. El resto siguen en cartera aunque Meunier no baja de los 40 millones de euros de precio, no está claro que el PSG lo venda y, además, depende de la opinión de Thomas Tuchel.
El último lateral relacionado con el Valencia es Hans Hateboer, defensa del Atalanta de 24 años que mide 1'87 metros y que también cumple con el patrón buscado. Según publicó ayer Voetbal International, Pablo Longoria habría ofertado por el jugador pero la cantidad, que no ha trascendido, habría sido rechazada por el conjunto italiano que pide entre 15 y 18 millones de euros.
Mario Fernandes, lateral derecho de la selección de Rusia y del CSKA de Moscú, responde a esos parámetros que busca Pablo Longoria en el mercado.