VALÈNCIA. Enzo Barrenechea se queda en Birmingham. El futbolista no volará en las próximas horas hasta València después de que su club, el Aston Villa, haya abortado la operación de cesión que había cerrado con la dirección deportiva del Valencia CF. En Mestalla se centran en buscar una alternativa con la dificultad de que el viernes se cierra el mercado. En Orriols, el centrocampista Pablo Martínez está esperando la ofensiva de los de Mestalla para jugar de nuevo con Pepelu, con otra camiseta.
Finalmente el equipo inglés no autoriza el préstamo del joven mediocentro argentino de 23 años porque argumenta que tiene a uno de sus centrocampistas, que ocupa un rol parecido a Barrenechea en el campo, en una situación de mercado que aconseja un traspaso por las condiciones económicas que ofrece el club comprador.
Además, según la argumentación del conjunto de Birmingham, que exculpa al Valencia y carga con la responsabilidad de haber frustrado la operación, la plantilla de The Villans tiene a otros dos jugadores con molestias musculares, que van a tardar en recuperarse más de lo que estaba previsto cuando cayeron lesionados. Estas dos razones han empujado al Aston Villa a detener el préstamo de Barrenechea a Mestalla que "está caído al 90%" según fuentes cercanas a la operación.
El Aston Villa había orquestado la cesión de Barrenechea a Valencia porque entendía que el futbolista iba a contar esta temporada con pocos minutos en la plantilla de Unai Emery. Necesitaba un contexto donde el argentino jugara partidos y había decidido que fuera Mestalla, aprovechando las buenas relaciones entre ambos clubes. La cesión era simple, sin opción de compra.
La dirección deportiva del club blanquinegro, que ya contaba con el visto bueno del máximo accionista, Peter Lim, para invertir en la llegada de Barrenechea intenta ahora encontrar una alternativa y, la más cercana, por la predisposición del futbolista y de su actual club, es Pablo Martínez, el mediocentro madrileño de 26 años del Levante UD.