Tengo que ser sincero y hablar del Valencia con la naturalidad del día a día pasando de caprichos personales. Algunas situaciones me gustan, otras me disgustan, y algunas otras, las mínimas, ni me gustan ni me disgustan, simplemente no las entiendo. Y podríamos poner un montón de casos pero yo me voy a centrar en uno que me ronda la cabeza desde hace tiempo y que Vicente Fuster, el amigo Fusta, ha dado a conocer en las páginas de Plaza Deportiva. Y el resumen es claro. Antes de escribir todo lo que pienso se lo voy a resumir en un simple titular: ¿Qué pasa con Hélder Costa?
Cuando el Valencia fichó a Hélder Costa a mí me pareció una operación algo bobita. Yo soy un simple observador del fútbol, no vivo directamente del fútbol, y fue un fichaje tan real como sorprendente. Mi reacción inicial, como simple aficionado del Valencia, fue la de no entender un fichaje que sonaba a muy poquita cosa. Pero mi opinión, obviamente, no tiene la mejor importancia y Costa llegó al Valencia y comenzó su trabajo con sus nuevos compañeros.
Empezaron los partidos y poco a poco Costa se fue ganando el cariño de la gente y el teórico respeto de su entrenador Bordalás. Costa estaba jugando y lo hacía con implicación y esfuerzo. Un partido tras otro, unos minutos tras otros. Pero lo insospechado en este jugador siempre fue al revés. Se ser un fichaje rarete a ganarse la titularidad o un puesto en el once alguna vez sin ninguna discusión. Y de eso, de golpe y porrazo, hemos pasado a dejar de existir para todo. Ni es titular ni es recambio de ningún compañero. Costa ha desaparecido del mapa. Y la razón para que eso suceda me superan de forma absoluta y no encuentro explicación al respecto.
Y lo cierto, en esta época de observador que simplemente observa y opina, es que lo de Costa me estaba llamando la atención, pero no quería decir nada por si fuera algo común y perfectamente entendido por todos de forma clara y contundente. Pero fue leer a Fuster y revolotear por mi cabeza una sensación de no entender que es lo que está pasando con este jugador. Y lo sigo sin entender. Para mi, por ejemplo, me parece más jugador que Marcos André o está más enchufado que un Chéryshev que está prácticamente desaparecido.
Y el tema es sencillo. En un visto y no visto Costa ha pasado de ser una sorpresa por su juego en este Valencia a desaparecer a lo bestia de cualquier inclusión en cualquier once de un partido normal. Del todo a la nada en un visto y no visto. Y yo, a estas alturas del campeonato, lo único que puedo añadir es que no lo entiendo y que posiblemente sí que exista una explicación pública que no se ha dado a conocer.
Bien, me quedo a la espera que alguien me lo explique y de paso me explique bien claro que es lo que ha sucedido para que desaparezca un delantero que parecía tener una pinta interesante. Y repito, el fichaje de Costa me sorprendió al principio y me congratuló después. Me quedo a la espera de alguna explicación, aunque no sea de forma directa, y me encantaría entender que es lo que ha sucedido.