Fin de semana redondo

VALÈNCIA. Fin de semana redondo en el que el valencianismo demostró que está muy vivo. El Valencia consiguió poner el broche con una victoria ante el Valladolid que deja el equipo virtualmente salvado a falta de tres jornadas que se podrán vivir con relativa tranquilidad en el terreno de juego. No obstante, un triunfo que no maquilla las miserias de un club en el que la afición ha decidido dar un paso al frente cuando la pandemia se lo ha permitido con el objetivo de recuperar su naturaleza. 

Los más de 6.000 aficionados que se unieron el pasado sábado a la manifestación contra la gestión de Peter Lim en el Valencia dejaron patente que la entidad es de los aficionados pese a que un multimillonario posea el 83% de las acciones. Las declaraciones del máximo accionista en Financial Times avivaron un 'fuego' que da la sensación que acaba de comenzar. 

En cuanto al partido, la realidad es que lo mejor fue el resultado. Tras una temporada llena de tristeza y dolor, llegar a falta de tres jornadas con la permanencia asegurada supone un respiro, pero no un motivo para caer nuevamente en la autocomplacencia. En el césped, el Valladolid fue bastante mejor en el primer tiempo. Los pucelanos tuvieron el dominio y amenazaron a un Cillessen, que sacó una buena mano a Jota con 0-0. El Valencia estaba incómodo con el sistema que había confeccionado Voro, pero los vallisoletanos acusaron su falta de pegada. 

Todo lo contrario le pasó al Valencia. Su primera parte fue desesperante y la preocupación sobre el devenir del partido era máxima. Sin embargo, el fútbol en ocasiones es cruel. Y en esta ocasión lo fue con el Valladolid. El Valencia hizo el 1-0 en su primer tiro a portería, que fue pasado el minuto 45. Guedes encontró a Gayà en el costado. El centro raso del capitán lo empujó a la red Maxi Gómez para dar un castigo severo a los de Sergio González. 

Tras la reanudación, el Valencia no se quedó ahí y volvió a golpear a las primeras de cambio. Pérdida del Valladolid en la salida que aprovechó Carlos Soler para asistir a Maxi Gómez y 2-0 en el marcador. Al Valencia le sonreía el resultado y optó por esperar atrás y aplicarse defensivamente. El Valladolid se volcó con lo que tenía, pero no le dio para meterse en el partido. El Valencia no conseguía rematar el triunfo al contragolpe. Finalmente, Cheryshev asistió a Correia en el 88 para que el luso finiquitara la victoria con un testarazo en 'plancha'. Con 39 puntos el Valencia está virtualmente salvado, pero su partido más importante todavía se está jugando.